Todos los años, cuando empieza la temporada de salas, en Granada se nota que hay ganas de volver por los “garitos” de siempre. Y si, además, tienes la oportunidad de hacerlo con un cartel que promete, se nota que la gente tiene buena respuesta y nuevamente pudimos ver Planta Baja con una buena afluencia de público.

Ayer, el cartel era más que atractivo, una nueva apuesta por traer música diferente a Granada por parte de la promotora Fuzzy Chain que ya tuvo un curso sobresaliente la pasada temporada y que tienen claro que su objetivo es darle un vuelco a la sensación de que, en esta ciudad, siempre se escucha lo mismo.

Los primeros en salir al escenario, los ganadores de la última edición del Emergentes, los granadinos Perro Mojado que llegaban con su apuesta por el punk garajero sucio y con actitud. Lo mejor del grupo, que se atreven con las letras en castellano y lo hacen bien, que tienen la suciedad justa para que su sonido sea justo lo que tiene que ser a pesar de que se mueven en un terreno más que explotado, pero aún saben sacarle partido.

Lo menos bueno, que siempre me quedo con la sensación de que el grupo tiene más potencial del que luego despliega sobre el escenario, quizás a fuerza de tablas terminen de sacar todo lo que pueden dar de sí. Sonido y actitud no les falta y está claro que en Granada han tenido muy buena acogida por parte del público y que si siguen así pueden llegar a tener un holgado espacio en la escena granadina a la que buena falta le hace que vayan saliendo grupos diferentes, eso sí, sin que se pierda la esencia del sonido local.

Tras ellos, los estadounidenses Useless Eaters que saltaron al escenario del Planta con muchas ganas a pesar de que, cuando vienes de fuera, no es nada fácil tocar en Granada. Un comienzo un poco frío por parte del público que no tardó mucho en rendirse al ritmo de estos chicos que, a pesar de su juventud, tienen muy claro qué música quieren hacer y se mueven como pez en el agua entre el rock y el garaje. Con solvencia y una puesta en escena moderada para lo que solemos ver por aquí en otros grupos, pero que se iba soltando poco a poco a medida de que el público, que siempre se queda rezagado fumando en la puerta, terminara de entrar y se uniera a los que se movían desenfrenadamente en las primeras filas.

Mucha calidad, buen sonido y mucha actitud para un grupo que está de gira por nuestro país y que se están dejando muy buen sabor de boca por los escenarios en los que ya han golpeado sus guitarras demostrando que ellos también pueden hacer bailar a un público tan difícil como lo es el granadino.

Nuevo éxito por tanto de Fuzzy Chain gracias a su capacidad de apostar por lo diferente y poner el ojo en grupos, que quizás, de otra forma, no pasarían por nuestra ciudad dejándonos noches tan interesantes como la del jueves en Planta Baja. Nos quedamos ahora expectantes esperando el próximo concierto de esta promotora que anunciaba hoy sorpresas en su facebook y que, seguro, no nos van a dejar indiferentes sea cual sea el cartel con el que piensan sorprendernos próximamente. 

Crónica y fotos: María Villa