En las noches de blues de Barcelona se oye el nombre de Hernán “Chino” Senra, porteño afincado en Barcelona que hace de su música un camino por el alma de la música negra y del gipsy jazz. Destacado líder de varios grupos (Down Home, Shine,…) y de una de las jams más concurridas de la ciudad ( martes en el Harlem Jazz Club de Barcelona) acompaña a sus ágiles dedos con una voz igualmente rápida.
AS: Para empezar siendo originales: ¿Por qué te llaman “Chino”?
C: [Risas]….sí, típica pregunta. Todo viene de pequeño que me llamaban así en la escuela, porque tenía los rasgos achinados y ahí quedó. Pasó el tiempo y creí que al venir a Barcelona me había desprendido del apodo, pero viajó una amiga mía y empezó a llamarme Chino, y ya la gente me lo llamó también. Además pasa una cosa, en Barcelona hay gente de todo el mundo y cuando tocaba en la calle hablaba con tipos que sólo se entendía en inglés y que les costaba decirme Herrrrnan, así que usaba Chino, que era más fácil.
AS: De dónde te viene la afición por las guitarras?
C: Mira, mi abuela me regaló una guitarra cuando tenía 13 años y no es que fuera la pasión de mi vida, pero lo cogí como un capricho de niño…Ya sabes, si todos mi amigos tocan la guitarra, yo quiero tocar la guitarra. A mí siempre me ha gustado el dibujo, no sé, diferentes expresiones artísticas, me imagino que si no hubiera sido la guitarra me hubiera puesto con otra cosa. Pero la guitarra llegó a mí así de casualidad, me empecé a apasionar por la música, por el blues y después de eso ya no me desprendí más
AS: Como los grandes del blues, ¿Bautizas a tus guitarras?
C: No, no, no, no…he tenido muchas y no me acordaría de los nombres
AS: Y sabemos que eso no es bueno [Risas]. A los 18 años viniste a Europa desde Bueno Aires ¿Placer? , o ¿Iniciar tu carrera musical?
C: Yo ya vivía de la música, era y ha sido mi único trabajo, por suerte. En Buenos Aires tocaba en la calle y me iba muy bien, ganaba más que en un trabajo normal. Lo que hice fue gastarme en ese pasaje, lo que otros usaron para el viaje de fin de curso de la secundaria. Veía una pérdida de tiempo gastarme el dinero en un viaje para emborracharme con mis amigos, si ya lo hacíamos durante el año y sin viajar [Risas]. Así que con ese dinero viaje a Europa (entonces el cambio nos favorecía), estuve tres meses dando vueltas, por aquí, por Suiza, Francia, Italia,…me fue muy
Me gustó tanto que me dije: Tengo que volver aquí. Me pasé un año tocando en Buenos Aires y Mar del Plata, luego volví aquí y me instalé en Barcelona. bien. No gasté nada en el viaje, lo que ganaba tocando en la calle, lo usaba para el alojamiento, las comidas. Sólo gasté en el Interrail para viajar tranquilo a los sitios.
AS: Fue a tu vuelta a Buenos Aires cuando formaste el grupo Down Home, ¿no?
C: Exacto, era la banda con la que tocaba en Buenos Aires, porque así se llama el estilo más rural y precario de blues. Tocábamos en la calle con contrabajo, yo con el dobro, una acústica, otro con una guitarra de doce cuerdas, una mandolina, la armónica…Y cuando me vine acá, ellos no pudieron viajar, pero ellos eran mi banda…fue cuando conocí a Ivan (Kovacevic), que se unió a el nuevo Down Home como contrabajista, y empezamos a tocar.
Mantuvimos el nombre por una cuestión práctica, ya que tocábamos los mismos temas,…pero lo seguimos con él cuando ya tuvimos temas propios,…
Ahora, por desgracia todo el grupo está muy liado con otros compromisos y parece que ahora Down Home deja paso a otros proyectos.
AS:¿ Los músicos habéis notado la crisis? No me refiero sólo a la económica, si no a las disposiciones del Ayuntamiento de Barcelona perjudiciales para las salas,…
C: Hombre, mantener a un grupo de cinco personas como DH, con lo que pagan las salas, el equipo,…es difícil. Pero por otro lado, la música es como cualquier otra actividad, cada uno la vive diferente. Yo la verdad, no he notado la crisis o los cambios, por suerte para mí, pero me lo he tenido que trabajar mucho. Hay gente que se queja, con razón, pero no ha pringado lo suficiente.
Yo he hecho esfuerzos muy grandes durante todo este tiempo
AS: Estás con Shine, Chino & The big bet, las jams de los martes en el Harlem jazz club, en el Honky Tonk, profesor en la Escuela de blues de Barcelona,…
C: Siempre he trabajado mucho, me gusta lo que hago. En realidad, no me supone tanto un esfuerzo porque me he volcado en lo que hago y me ha ido bien
AS: Y se nota…¿Tu crees que el blues, el swing pasa de moda?
C: Yo creo que una particularidad de cualquier expresión artística es hacer lo que tú quieres hacer, satisfacerte a ti mismo. Luego ha de existir la casualidad de que eso que tu haces, le guste a los demás. Si haces algo para que le guste a los demás, pero no a ti…no funciona, es falso. Lo difícil es esa coincidencia. Por suerte lo que he hecho, ha gustado. Es verdad que oigo cosas que toqué de hace diez año y pienso que es una mierda, pero a la gente de entonces le gustaba. Poco a poco vas puliendo cosas, pero no pensando en lo que le gustaba a la gente, si no me hubiera buscado otro estilo de música más comercial. Es más, siempre he intentado especializarme en los sonidos que no se solían hacer.
Ahora hay más grupos de swing, de blues,…pero todo lo que hemos hecho ha gustado y se ha dado el fenómeno de: Si había niños, gustaba a los niños, a los padres, si había gente,…es un estilo que puede gustar a todo el mundo, no pasará de moda, puede que no esté en los grandes medios pero siempre funciona.
AS: ¿Qué significa para ti Django Reinhardt?
C: Uhh, Django me encanta, es uno de los grandes para mí. Lo que me impacta de él, es su falta de barreras: me quemo la mano, sigo tocando y acabo siendo el puto amo. Eso es una de las cosas que me ha servido para continuar en lo que hago. Yo toco en una afinación diferente, en teoría más limitada…al principio sólo tocaba blues, pero luego he seguido con otros estilos y me fijaba en tipos como él y me decía: Si ellos han podido conseguir superar sus barreras, yo también puedo. Lo que más me llama la atención de Django y de otros, es su personalidad. No intentan imitar a nadie, hacían brillar lo que tenían ellos, por eso han perdurado a lo largo de la historia.
AS: Django no se dejó estigmatizar por no tener una mano perfecta…
C: Y Wes Montgomery tocaba con el pulgar, y no por eso dejó de tocar o sonaba peor. Estos son los músicos que pones una grabación y dices: Es él. Con alguna música moderna, no diferencias ni quién toca. Yo a lo que aspiro es hacer algo propio, sin imitar a nadie.
AS: De esa fascinación por Django, nació el Festival Django de l’Hospitalet (Barcelona), que ya va por su tercera edición.
C: Bueno, eso fue una iniciativa de Albert (Bello) y ha funcionado muy bien. Esperemos a ver este año, con el tema crisis y demás.
AS: Como ya hemos comentado, eres profesor de la Escuela de blues de Barcelona junto a Ivan Kovacevik, Martí Elias, Dani Nel·lo, Big Mama Montse,... ¿Cómo ves a la nueva generación de bluesman/blueswoman)
C: En la escuela veo a muchos que pueden brillar, pero depende de ellos. Es un tema complicado, casi filosófico. ¿Cuántos se apuntan a la universidad?, ¿Y cuántos cracks salen? Depende absolutamente de ellos. Ahora tenemos la visión de que todos podemos hacerlo todo, que el éxito es algo accesible, pero las cosas no son así en la vida. Unos destacan en una cosa, otros en otra y cada uno ha de buscar su camino. Si los alumnos ponen todo su empeño puede que si brillen, pero muchas veces no sólo depende de tu capacidad con el instrumento, si no tiene que ver con más cosas,..tu implicación, no sé…
AS: ¿Te queda tiempo libre para ti mismo, para el ocio?
C: Poco
AS: ¿Escuchas algo de música que no sea tuya o de tus compañeros?
C: No tengo tiempo, tampoco. Pero suelo escuchar de todo, bueno, de todo no: Escucho swing, me gusta el Calipso, los boleros, el tango, la música tradicional,…lo que intento es no ser fanático de una sola música. En el pasado, los artistas no tenían el acceso a la música que hay ahora. Yo conecto mi Spotify y…escucho lo que quiero. A la hora de estudiar o sacar temas, escucho varias músicas y las saco a mi manera.
Lo que sí te digo es que no escucho mucha música de ahora, lo mío son los músicos muertos [Risas]
AS: [Llega Albert Bello] Bueno, como última cosa te voy a poner en un compromiso. Termina esta entrevista como si fuera uno de tus conciertos, que sabemos que tienes bastante labia,…
C: Bufff, no sé,…que el único camino en la música es hacer brillar lo que uno tiene. La única forma es intentar hacerlo todo a tu manera.
Podéis seguir el apretado calendario de Chino en su página web
DAVID MARTINEZ LLAMAS
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