Pero como nosotros ya nos hemos cansado de decir lo bien que está el espectáculo, lo entretenido que es su show y demás lindezas hemos decidido obviar el contenido musical del mismo, un conciertazo en la sala Benidorm Palace con toda su caspa, su realización ochentena y, sólo a modo de crítica constructiva, un balance vocal por parte de los técnicos de sonido cuestionable. Pero como hemos dicho a parte de este breve comentario y el track list vamos a pasar a la parte más peliaguda… ¡El documental!
1 Miro la vida pasar
2 Un hombre de verdad
3 La funcionaria asesina
4 Mi novio es un zombie
5 Bote de colón
6 Bailando
7 Quiero ser santa
8 Descongélate
9 La pequeña edad de hielo
10 Rey del glam
11 El cementerio de mis sueños
12 ¿Cómo pudiste hacerme esto a mí?
13 Hombres
14 Criticar por criticar
15 Retorciendo palabras
16 No sé qué me das
17 Más es más
18 Absolutamente
19 A quién le importa
20 Ni tú ni nadie
21 Electricistas
22 Hagamos algo superficial y vulgar
23 Eternamente Inocente
24 La mano en el fuego
25 Perlas ensangrentadas
26 Documental: "Un día cualquiera en Benidorm"
Y es que esperamos que Fangoria esté en nómina del Ayuntamiento de Benidorm por su labor propagandistica, turístico y su venta activa de la ciudad. No es un secreto que Alaska disfruta de este bizarro punto de la costa de la Comunidad Valenciana sin pudor y lejos de la playa como se puede apreciar por el tono fantasmal de su piel. Es que además nos enseñan los puntos más surrealistas de la ciudad de los rascacielos.
Comienzan su recorrido por su rincón favorito. No es un secreto (y por supuesto no es que seamos unos acosadores, bueno, un poco) que el grupo como parte de su contrato pide siempre una localización específica para sus noches de glamour y acelgas con champán, el icono ochenteno conocido por todo Benidorm como “El Flamingo”. El Oasis Flamingo es sin duda un resort más típico de guiris despistados que de estrellas de la canción pero con ese rollo kitsch que se gastan es una decisión la mar de coherente. Su emplazamiento es básico para comprender que la vida del grupo se desarrolla en la misma manzana.
En primer lugar el centro comprístico más visitado es El Corte Chino, una macro tienda de todo a 100 con objetos trasnochados, souvenirs petardos y demasiado plástico. Como muchos habrán visto en múltiples ocasiones es muy habitual que Alaska se pasee por la tienda comprando desde gatos que saludan a flores de plástico. Objetos inservibles que adornan la sobrecargada y rococó casa de Madrid cual tesoros de otro tiempo.
Muy cerca del hotel (es decir, cruzando la acera) se encuentra el bar de moda. Rachel’s es un bar donde los Hooligans ingleses ay americanos disfrutan de sus partidos. Las televisiones hablan en la lengua de Shakespeare y suelen tener deportes las 24 horas del día cosa que a priori a nuestros protagonistas no les llama mucho la atención pero…
¡Tienen Bulmers! Una cerveza/sidra de manzana (y la última vez que lo visitamos también de pera) que es una de las favoritas de Fangoria. Si después de ingerir una botella (que es medio litro cuidadín) queda ganas de más seguimos con la ruta.
En el planning no pueden faltar las tiendas de antigüedades. Pasear por el excelente rastrillo dominguero está fuera de la ecuación por el calor aunque nos gustaría recomendárselo desde Alquimia Sonora porque su mezcolanza es digna de admirar, puestos multilingües regentados por inmigrantes del primer mundo que venden desde cremas de algas a excursiones al Safari Park. Pero a lo que vamos. Alaska, Nacho y suponemos que Mario visitan El Cisne, una conocida tienda de antigüedades que contempla una amplia gama de productos y de donde normalmente salen siempre con alguna adquisición.
El documental termina con una vista aérea en helicóptero. Como nuestros bolsillos están más ajustados os recomendamos que os acerquéis al Gran Hotel Bali, por un módico precio puedes ascender a su terraza y disfrutar de las increíbles vistas.
¿Quieres oír todo esto en primera persona?
Ea, pues cómprate el cd + dvd y disfruta como un enano.
0 Comentarios
¡Comparte tu opinión!
Esperamos tu comentario