Entrevista a Goiko: "Llevamos al extremo la palabra independiente, hacemos lo que nos gustarĂ­a escuchar"

Por el nombre podrĂ­amos pensar que el fĂºtbol es una de sus pasiones. O que provienen del norte, de zonas fronterizas con parajes pirenaicos que influyen en la aparente frialdad de sus canciones. Pero ni una cosa ni otra. Goiko –apĂ³cope del apellido de dos peloteros histĂ³ricos en este paĂ­s- se formaron en Barcelona allĂ¡ por 2009, cuando a las canciones grabadas de la forma mĂ¡s casera posible (los recursos econĂ³micos no daban para mĂ¡s) por JuliĂ¡n LĂ³pez de Santa MarĂ­a con su guitarra y sus teclados bĂ¡sicos empezaron a darles forma Marcel BagĂ©s a la guitarra, Arnau PĂ mies al bajo y GenĂ­s BagĂ© a la baterĂ­a. Juntos llevan desde entonces trabajando sin prisa y sin pausa, y juntos han comenzado el año metiĂ©ndose en el estudio una vez mĂ¡s sin hacer mucho ruido y contando con la materia prima fundamental: unos temas perfilados con mimo, con el cuidado que se pone en algo que te ha costado mucho tiempo y esfuerzo conseguir y que no estĂ¡s dispuesto a permitir que se pierda con el tiempo y el olvido. SĂ­, hablamos de otros mĂºsicos que parecen estar en esto para perdurar, o eso se desprende de las palabras de su cantante, que saciĂ³ asĂ­ nuestra curiosidad:

Alquimia Sonora: Desde finales de 2009 estais pensando, componiendo y grabando canciones. ¿QuĂ© ha pasado, creativamente hablando, desde aquella primera maqueta titulada ‘La gran evasiĂ³n’ que vosotros mismos os encargabais de repartir en los conciertos?

JuliĂ¡n: No ha cambiado demasiado la manera de trabajar: Yo compongo las canciones, y las grabo en mi cuatro pistas en casa, programando sonido de baterĂ­as acĂºsticas en una vieja caja de ritmos, y añadiendo una lĂ­nea de bajo simple, algunas guitarras, y las voces, cĂ³mo no. Esta pre-maqueta se envĂ­a por mail al resto del grupo, cada uno se lo trabaja en casa, y asĂ­ optimizamos al mĂ¡ximo el tiempo en el local de ensayo. Y allĂ­ puede ser que la idea se parezca muchĂ­simo al original, o que le demos completamente la vuelta… nunca se sabe. Lo que sĂ­ que ha ido cambiando, es el ir conociendo quĂ© es lo que funciona mejor o peor, y los temas mĂ¡s recientes, gracias a este conocimiento, van teniendo elementos y una madurez que costaba encontrar en los primeros. Y en esa bĂºsqueda seguimos.

AS: ¿Hay una escena catalana sĂ³lida y con bases de futuro para que volvamos a acuñar la famosa frase de “bandas emergentes”?

JuliĂ¡n: Ahora mismo hay mucha gente en Catalunya haciendo cosas interesantĂ­simas, eso es indudable. Lo que me hace dudar de que sea sĂ³lida y con bases de futuro no son las bandas en sĂ­, que hay mucha gente con una calidad musical brutal, sino que cada vez hay menos salas de conciertos que traten dignamente al mĂºsico, menos dinero en las administraciones para la cultura en general… el panorama para apoyar a toda esa gente no es alentador, que digamos.

AS: ‘Sin titular’ y autoeditado. ¿El camino mĂ¡s corto o la nueva necesidad de los mĂºsicos?

JuliĂ¡n: El tĂ­tulo es tambiĂ©n una de las canciones del disco, puede que una de las mĂ¡s experimentales. Nos pareciĂ³ que esa canciĂ³n era tambiĂ©n un resumen del sonido de Goiko, y una manera de seguir jugando a dejar abierta la interpretaciĂ³n que pueda hacer quien escucha el disco. Lo de la autoediciĂ³n era una opciĂ³n mĂ¡s que posible desde el principio, porque te das cuenta de que los sellos tampoco estĂ¡n como para hacer mucha nueva apuesta, y menos hablando de una banda que justo empieza a buscarse un hueco. Y los que te proponen algo tampoco pueden apoyarte en mucho mĂ¡s que si lo editas tĂº mismo, asĂ­ estĂ¡n las cosas.

AS: En bandcamp se puede escuchar el disco Ă­ntegro e incluso descargarlo a un mĂ³dico precio. Supongo que ni os lo pensasteis a la hora de intentar comercializarlo a travĂ©s de dicho canal.

JuliĂ¡n: Dices bien. Sabemos en quĂ© lugar nos encontramos en cuanto a difusiĂ³n, no hemos hecho mĂ¡s que empezar, y que dentro de nuestras posibilidades no hay que escatimar en nada para que la mĂºsica llegue al mĂ¡ximo nĂºmero de gente posible. Y para eso, bandcamp es un medio ideal.

AS: Os ha ayudado Jordi C. Corchs, un habitual en proyectos independientes como Standstill o Refree, entre otros nombres de prestigio. ¿Ha ayudado a redondear las canciones o bĂ¡sicamente traĂ­ais el trabajo hecho de casa?

JuliĂ¡n: Jordi desde el principio tuvo claro quĂ© sonido era el que habĂ­a que encontrar. Que los instrumentos sonaran cerca, pero sin compresiones exageradas, e intentando reproducir lo mĂ¡s fielmente posible las dinĂ¡micas del directo, como si estuvieras en una sala no demasiado grande y haciendo que se note hasta el mĂ¡s pequeño de los detalles.El proceso de grabaciĂ³n en sĂ­ siempre te ayuda a redondear los temas, aunque en algunos casos es mĂ¡s exagerado que en otros, desde luego. Podemos decir que hubo sorpresas muy agradables al respecto, sĂ­.

AS: Al halo de costumbrismo que respira la producciĂ³n tambiĂ©n contribuye la portada. Sobria, estampada a mano por vosotros mismos y casi reivindicando el trabajo artesanal.

JuliĂ¡n: El diseño es de mi hermana IcĂ­ar. Obviamente el presupuesto que manejamos es muy pequeño, por lo que sabĂ­amos que tenĂ­amos que hacer algo que a pesar de no ser demasiado caro, fuera personal, nos debĂ­amos salir un poco de la norma. Hacerlo mediante estampado con tinta, uno a uno, ha requerido su tiempo, pero el resultado ha sido muy satisfactorio, y es la manera de que cada ejemplar tenga sus peculiaridades, que no haya dos exactamente iguales.

AS: Lo mĂ¡s importante siempre deben ser las canciones. ¿Se construyen tambiĂ©n bajo ese prisma, el de la artesanĂ­a?

JuliĂ¡n: Yo dirĂ­a que sĂ­. Recientemente nos preguntaron algo al respecto de bases programadas, de utilizar mĂ¡s la tecnologĂ­a. Los cuatro coincidimos en que por ahora eso no estĂ¡ ni siquiera en el horizonte, que seguimos adorando que el sonido salga por una acciĂ³n de nuestros dedos al pulsar una tecla, hacer vibrar una cuerda, golpear con una baqueta…

AS: No es difĂ­cil establecer similitudes o incluso identificar vuestro sonido con otras bandas mĂ¡s “mayoritarias” (las comillas en este caso son obligatorias). La sombra de McEnroe, por ejemplo, planea sobre gran parte de este trabajo.

JuliĂ¡n: No es la primera vez que me dicen que nos parecemos a ellos… es uno de esos misterios de la mĂºsica, porque nadie de la banda los ha escuchado hasta hace unos dĂ­as, cuando nos lo comentaron por primera vez.

AS: Lo normal es que a veces se califique de elegante vuestra forma de hacer canciones, quizĂ¡ por ese cuidado que poneis sobre todo en las letras. ¿Hay que tener los oĂ­dos muy bien educados o ser algo mĂ¡s exigente para disfrutar de la propuesta de Goiko?

JuliĂ¡n: Muchas gracias por lo de la elegancia. Nunca ha estado en nuestro Ă¡nimo el llegar a un pĂºblico en particular, pero sĂ­ sabemos que es mĂºsica que requiere atenciĂ³n, no sirve -en general- para estar de fondo en una fiesta.

AS: Es lo que tienen los proyectos tan personales, porque una de las cosas que mĂ¡s nos atrae es esa capacidad para pasar de la calma mĂ¡s profunda a la tempestad elĂ©ctrica mĂ¡s brutal.

JuliĂ¡n: Nos fascina que la mĂºsica tenga sus matices, sus subidas y sus bajadas, ayudando a explicar la historia que narra la canciĂ³n. Que a pesar de que el ritmo de una canciĂ³n sea lento, se empuje en esos momentos con algo de mala leche. Por eso tambiĂ©n los temas son en general bastante largos, para desarrollarlos al mĂ¡ximo en ese aspecto.

AS: No son estilos muy comerciales ni que os faciliten, por asĂ­ decirlo, la entrada en el mercado: el lo-fi o el noise, por ejemplo, han dado grandes bandas a la historia del rock pero nunca han conseguido salir del gueto de la mĂ¡s pura independencia.

JuliĂ¡n: En eso sĂ­ que llevamos al extremo la palabra “independiente”, tan usada en los Ăºltimos tiempos. Desde el momento de obtener los primeros acordes hasta ponerle el Ăºltimo arreglo, siempre hacemos lo que a nosotros mismos nos gustarĂ­a escuchar, sin pensar en mucho mĂ¡s.

AS: La presentaciĂ³n del disco en Barcelona, en aquel concierto en HeliogĂ bal a finales de 2012, fue relativamente un Ă©xito, teniendo en cuenta la escasa repercusiĂ³n mediĂ¡tica que habĂ­ais logrado. ¿Esperabais sin embargo que el pĂºblico estuviese tan entregado?

JuliĂ¡n: Fue un concierto maravilloso. No lo digo por nuestra actuaciĂ³n, lo digo porque no hay nada que motive mĂ¡s a un mĂºsico que una sala en silencio, con ese ambiente de escucha, con todos los que vinieron atentos a lo que hacĂ­amos. Estamos acostumbrados a que la gente en general vaya a los conciertos de fiesta, para contar al dĂ­a siguiente a sus amigos dĂ³nde ha estado, y no escuchan el concierto, sĂ³lo lo oyen de fondo y se dedican a tener conversaciones gritĂ¡ndose al oĂ­do y a molestar a los que sĂ­ prestan atenciĂ³n. Por eso creo que hacer un concierto asĂ­ es impagable, sea para diez, cien, o mil personas. Tampoco hay que estar como en el Liceo, no nos pongamos extremistas, ¿eh?

AS: Se puede hacer un vĂ­deo delicioso sin apenas medios, con imĂ¡genes grabadas en un simple Super 8, y transmitir tanto como lo haceis. La canciĂ³n tambiĂ©n ayuda, claro.

JuliĂ¡n: ¡Gracias! Es un video a partir de imĂ¡genes de mi infancia, grabadas por mi padre con un tomavistas. No tenĂ­an ni sonido, vamos. La calidez del Super 8 ayudĂ³ mucho a transmitir el espĂ­ritu de la canciĂ³n, esa mirada a la infancia con agradecimiento y con una pequeña dosis de nostalgia, por quĂ© no decirlo. 

                            

MĂ¡s info: 
http://goiko.bandcamp.com/
https://www.facebook.com/goikomusic?group_id=0&filter=3

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