El
nuevo álbum de los antiguos componentes de Megaphone ou la Mort,
John Alexander Martínez y Diego Summo firme candidato a ser uno de
los mejores del año.
El
álbum que reseñamos a continuación no es una novedad en sentido
estricto. En el mundo de lo digital en el que nos desenvolvemos, es
habitual que un disco esté grabado un día, disponible en la red al
siguiente; reseñado, comentado y calificado al otro y olvidado poco después. Hoy en día la accesibilidad a los
productos culturales es directamente proporcional al grado de
duración que ocupan en nuestra mente y nuestros sentidos. El enorme
flujo hace que apenas le dediquemos un instante a su disfrute,
relegándolos luego a la memoria de nuestro disco duro de donde son
rescatados de tanto en tanto si no son absorbidos con voracidad de
agujero negro por la enorme cantidad de semejantes que les
precedieron. Es el precio que hemos pagado por el ilimitado acceso a
la gran cantidad de artefactos culturales a nuestra disposición a apenas a un par de clicks. Por ello, en ocasiones, sumidos en la
mediocridad de la cultura del pincho y cierro inherente a lo digital,
dejamos pasar por alto enormes canciones que quedan enterradas en las
entrañas de nuestros dispositivos digitales como valiosos pecios en
el fondo del mar.
No
ha sido el caso para el que esto suscribe con el álbum que John
Alexander Martínez y Diego Summo, componentes de Le
Garçon Rêvé, banda que toma su nombre de un tema del primer
trabajo de Megaphone ou la Mort han publicado para
descarga gratuita en su bandcamp desde el pasado 10 de junio. Con el
definitorio título de "Songs for mediocre men vol. 1",
el dúo ha presentado una colección de diez temas que sitúan su
listón creativo varios peldaños más alto de lo que habían
conseguido con sus dos álbumes precedentes: los magníficos
"Camarade Coma" (Dress For Excess, 2008) y "A
Silent Language" (VGB Records, 2013) de los extintos y
aclamados Megaphone ou la Mort. "Songs for mediocre men vol.
1" es la continuación natural de la trayectoria musical de
la pareja angloargentina en cuanto a calidad musical, voluntad de
exploración de nuevos sonidos y un cuidadoso esmero a la hora de
trabajar los textos incluidos en las canciones, consiguiendo una
simbiosis perfecta entre música y poesía. Decir de un disco
publicado en la primera mitad del año que sin lugar a dudas va a ser
uno de los mejores de éste, no es una apuesta de vidente de programa
de madrugada, sino la constatación de que Diego y John han vuelto a
reunir en una obra un conjunto de canciones con una calidad inusual
en el panorama musical contemporáneo por mucho que éste en estos
momentos atraviese un gran momento en cuanto a variedad y calidad de
sus propuestas. Ante una oferta así, obras del calibre de este
"Songs for mediocre men vol.1" adquieren la
apariencia de disco "clandestino" como señalaba con
acierto John en la entrevista mantenida sobre el álbum, pasando casi
desapercibido entre el aluvión de otras ediciones.
Hace
aproximadamente una década que tanto Diego como John se instalaron
en nuestro país, el primero llegado de Argentina, y el segundo desde
París tras haber pasado su infancia y juventud en Gran Bretaña.
Diego Summo perteneció dos de las bandas transcendentales
del rock underground argentino: Los Subterráneos (en la que
también se encontraba Sergio Subterráneo, futuro batería de
MOLM), con los que publicó "Buenos Aires Azul" (1996)
y posteriormente La Rosa de Cobre, donde junto al poeta
Adrián Yanzón editó "Alto Consumo (Doctrina de
Plutón)" (1998). Por su parte, John nació en Birmingham (Reino
Unido), hijo de español e irlandesa. Vivió en Londres y París
antes de instalarse en Valencia. Fue cantante,
letrista y guitarrista de la banda gala Station Joya que
obtuvo un relativo éxito con su tema "Foyer Vietnam"
(2004) que mezclaba la furia de Sonic Youth con la
instrospección de Joy Division. En solitario registro el EP
de cuatro canciones "Five Days", del que sobresale
"Angelina Come". Tras su encuentro en Valencia,
junto con Diego Summo (batería), Fernando Martí (bajo),
Alberto "Correcto" (guitarra) y la colaboración de
Luís Alcober Aubán (teclados y trompeta) registraron los dos
álbumes que les dieron a conocer como Megapnone ou la Mort,
"Camarade Coma" y "A Silent Language"
que los situaron en lo más alto de la escena indie
valenciana.
Tras
la ruptura de Megaphone ou la Mort, Diego y John
concibieron un proyecto que significaba un punto de inflexión en
la carrera compositiva que ambos comparten desde hace casi una
década. Para materializar éste, se valieron de Sergio Devece
(batería, bajo y teclado sintetizador) para la producción
artística. Recurrieron también al gran Luís Alcober Aubán
(teclado y trompeta) que ya había participado en la grabación de "A
Silent Language" y en los últimos directos del sexteto.
Tanto John como Diego coinciden en que las numerosas colaboraciones que incluye el álbum fueron muy meditadas y obedecen más a la selección de la solista o músico adecuado que requería el tema, que a una reunión informal de amigos que se suman al proyecto para echar una mano. Es el caso de las vocalistas femeninas: Marion Küchenmeister (actualmente en Modern Slaves), Stéphanie Cadel (Stéphanie Cadel et la Caravane) y Carolina Otero (Lülla y Carolina Otero & The Someone Elses). En cuanto a cantantes masculinos, en el spoken word del tramo final de la gran "The Man That Explodes" magnífico tema que cierra el álbum, colaboró Nathan Mothes. También aparecen en los créditos del disco Jose Luís Granados (saxo en "Stained Heart" y "Blossoming Apathy"), Nacho Nacher (guitarra en los finales de "Nova Police", "Blossoming Apathy" y "The Crack Up") y Juán Luís Salmerón (guitarra de apoyo en "Dora"). El álbum grabado, mezclado y masterizado en los estudios Stardust de Alboraya entre junio 2013 y marzo 2014 exhibe en su cubierta una fotografía de Rohan Tapa y en contracubierta y diseño interior, dibujos y artwork de Stella Blasco Berlanga.
El
álbum se abre con uno de sus mejores temas, la breve y exquisita
"Come on Stranger" en la que John comparte labores
vocales con la alemana Marion Küchenmeister. De nuevo nos
reencontramos con la voz grave y profunda de John, las sencillas
armonías tejidas por la guitarra de Diego y esta vez sostenidas con
unas notas de piano y sintetizador que apoyan un tema sencillo pero
tremendamente hermoso, que se crece en el final dejándonos un gran
sabor de boca. Fue el segundo single extraído y cuenta, como el
resto de los editados hasta ahora, con un video-clip realizado por
Cat & Gos Films, productora valenciana dirigida por Stella
Blasco Berlanga y Jordi Todolí. Le sigue "Stained
Heart", tema que les sitúa en esa línea de pop elegante y
cosmopolita que nos recuerda a los mejores Roxy Music. Sobre
ecos de jazz y un ritmo medio tempo, pasajes minimalistas, y
detalles preciosistas, John despliega a gusto su faceta de crooner
que se acrecienta al final del tema sobre las notas encendidas
del saxo de José Luis Granados. "She Won't Fall In
Love With Me Again" es el tercer tema del álbum y el
primero que conocimos del disco gracias al video que Stella Blasco
Berlanga registró de su actuación en la última edición del
festival de Pop-Rock del Turia FESTUR), en el que el dúo nos
presentó un adelanto de los temas que estaban grabando en los
estudios de Devece en Alboraya. Los acordes de Diego presagian
una historia de desamor y voluntades contrariadas. Apoyada vocalmente
por la coreada letanía de Marion Kürchenmeister, John
despliega su interpretación más histriónica, aquella que nos pone
los pelos de punta y en la que se aproxima a Eric Burdon o
Nick Cave, para disolverse en un final hipnótico a la vez que
etéreo. Llevamos tres y tres aciertos.
"Nova
Police" se inicia con un
sencillo riff de
guitarra, y apenas un punteo de guitarra leve y unas delicadas notas
de teclado. Todo ello estalla en el estribillo donde el riff
se vuelve imperioso y
potente y una vez más, la voz de John encuentra su acomodo en los
registros más intensos. Canción llena de vaivenes, subidas y
bajadas que se disuelve entre los susurros de John y notas de teclado
apenas insinuadas. "The Crack-Up" Magnífica
melodía a la guitarra de Diego que encuentra su réplica en el
teclado de Luís, mientras John declama una historia heredera en su
título de la novela autobiográfica de Francis Scott
Fitgerald en la que el autor
norteamericano ficciona su fracaso vital. Un cambio de ritmo a mitad
canción es introducido por la magnífica interpretación de Carolina
Otero acompañada de un juego
de guitarras en la mejor línea de los Galaxie 500 de "On
fire". A estas alturas el
álbum ya nos ha convencido y aún queda mucho por oír, exactamente
la mitad.
Con
"Dora" regresa la vena francófona de John con el
único texto en francés del disco. Canción cuya hermosa y
reluciente melodía, como una herida, es guiada por el punteo de la
guitarra de Diego y los acordes de acompañamiento de Jose Luís Salmerón. Para los coros, John se hace
acompañar de Stéphanie Cadel para cerrar uno de los temas
más dolorosos del disco. Como un bálsamo para contrarrestar
anteriores heridas, "My Uncanny love" es un hermoso
tema con unas notas de teclado casi infantil que dan paso a un
estribillo por el que revolotea de nuevo el espíritu de Dean
Wareham pero esta vez bajo la advocación de Luna. Una
absoluta delicia, de esas que piden rewind una y otra vez.
"Gandía Blues" es el tema más lento del álbum, con una
voluntad casi elegíaca. Se oye con la respiración contenida y
riesgo de derramar alguna lágrima hasta que al final estalla en un
crescendo marcado por batería y guitarras. The National o
Wilco se sentirían muy cómodos interpretándolo. Cambio de
tercio con "Blossming Apathy": riff de
guitarra que linda con el funk y ritmo sincopado para
articular un tema en el que brilla la melodía de guitarra española
de Diego, el saxo de Jose Luís Granados y la guitarra de
Nacho Nacher. Banda sonora perfecta para conducir a solas a
altas horas de la noche por la ciudad desierta.
Para
poner fin a un álbum excepcional nada mejor que un tema excepcional:
"The Man Tha Exploded" es una de esas canciones que
cuando cierras los ojos te las imaginas interpretadas en un gran
festival o en un estadio, con miles de gargantas coreando el
estribillo final. Los casi siete minutos del tema están construidos
de manera creciente para llevar a la audiencia a un final que roza lo
épico sin caer en la desmesura. Si alguien recuerda al Jim Kerr y
los Simple Minds de la época del "Don't you forget
about me" sabrán reconocer a que me refiero. El abrupto
falso final sobre el minuto cuatro da paso a un repetitivo
estribillo, apoyado en la batería y percusiones de Sergio, las
guitarras de Diego y los coros de Sergio, Diego y John, y los spoken
words de Nathan Mozes y Stéphanie Cadel. Cuando
cesa, uno se queda sin moverse en el asiento sin apenas dar crédito.
Sólo queda volver a darle al play.
Lo
primero en lo que uno piensa tras escuchar un disco tan grande como
"Songs for mediocre men vol. 1" es: ¿Para cuándo
el directo? Pudimos ver sobre el escenario por primera vez en formato
acústico Le Garçon Rêvé en el ya mencionado FESTUR,
el pasado 19 de noviembre. Esa cita y otro concierto en dELUXE Pop
Club han sido las únicas fechas hasta ahora en nuestro país. El
pasado mes de mayo se embarcaron en un minitour por Portugal con dos
fechas: el 29 de mayo pasado sobre el escenario del Cineclube de
Telheiras y el 30 en el Garagem de Graca, en la primera
cita acompañados de los lusos Bohemia Vadia y en la segunda
en solitario. El veinte de este mes se desplazarán a Madrid para
grabar su participación en el Noise Pop Festival y tienen
confirmada una fecha para noviembre en el Recordshop de
Russafa. Esperemos que alguna promotora o club se anime a darnos la
oportunidad de disfrutar de su magnífico directo y de la calidad de
sus temas. No creo que estas letras les convenzan, sus canciones sin
lugar a dudas si.
JOHN ALEXANDER MARTÍNEZ:
Un disco claramente más autobiográfico. Quería explorar varias facetas, un lado totalmente personal y intimo ("She Won't Fall In Love With Me Again",
"My Uncanny Love"), recuerdos de una noche etílica ("The Man That Exploded"), la Safor ("Gandía Blues"), obsesiones literarias (Pierre Drieu La Rochelle en "Dora"), el lado camaleón, torturado de ciertos seres ("Come on, stranger", "Nova Police"), en determinadas situaciones, otros tal vez dirían un lado puto, no sé. Personalmente, hace tiempo que acepte mi parte de mediocridad. Tenía el título del disco antes de tener las
letras del disco. Fue un punto de inflexión a la hora de escribir las letras seguramente. El disco empezó con mi voz y la guitarra de Diego, grabando unas maquetas caseras en su casa con cajas de ritmo durante otro caluroso verano valenciano del 2013... para acabar sonando como un disco de banda. No era premeditado, surgió naturalmente con la ayuda del productor, Sergio Devece. El próximo será más unplugged sin lugar a duda. Con este disco, de una forma, he podido descargar una mochila un poco pesada que venía cargada de hastío y de una palpable amargura en ocasiones. También, trabajo con mi imaginario sentimental en el que espero extraer algo de poesía y de humor. Aunque, últimamente creo que estoy en la búsqueda de una senda más espiritual, de perdón y de reconciliación.. conmigo mismo! jajaja!
DIEGO SUMMO:
Desde
que empezaron a salir las canciones que luego formarÍan parte del
disco sabíamos que teníamos que volver a empezar de nuevo desde el
principio,echar una mirada profunda en nuestro ser interior. El
resultado es un reflejo de todo lo que hemos vivido y de lo que
somos, queríamos hacer un disco canción a canción y que después,
todas encajaran juntas en un coctel de alto voltaje emocional que
destilara pureza e intensidad.
FOTOGRAFÍAS: Fotografías, dibujos y diseño gráfico: Stella Blasco Berlanga
Fotografía portada: Rohan Thapa
MÁS INFO:
https://www.facebook.com/legarconreve
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