Seis mil “clandestinos” llenaban el campo de futbol 7 en Frigiliana el pasado domingo para cerrar la X Edición del Festival de las 3 Culturas poniendo, un broche de oro, a un festival inmejorable. Comenzando con cierto retraso ya que a la hora de comienzo oficial aún no habían podido entrar todas las personas que hacían cola en la puerta, el artista franco-español saltó sin pausa durante dos horas y media en plena sintonía con un público que cantó y botó al ritmo de un artista por el que parecen no pasar los años.

Tras una apertura donde el bajista animaba al público a hacer un gran recibimiento para el resto de la banda y el propio Manu Chao, el característico timbre de voz del cantante el comienzo de un concierto donde no faltó ninguna de las canciones por las que es más conocido. Temas como “Clandestino” “Próxima estación, Esperanza” o “Me gustas tú” entre tantos y tantos títulos imprescindibles en la discografía del que fue líder de Mano Negra.

Seis mil personas saltando, gritando y agitando banderas, uniéndose a voz en grito a las reivindicaciones y protestas que son sello de un artista que siempre pone voz a los problemas de nuestra sociedad actual y la levanta contra ellos.

Con momentos emotivos, como el emular del corazón de los cuarenta y tres desaparecidos en Ayozinapa, como el corazón de los refugiados sirios, como el corazón de las seis mil personas que latieron hasta bien pasadas las 1,20 h. de la madrugada al unísono con el de un Manu que no se dio tregua y demostró que las tablas de una banda son inversamente proporcionales al tiempo que dejan entre canción y canción y que, en su caso, es nulo.

Demostrando la gran capacidad para conectar con el público, para convertir un concierto en fiesta a ritmo de ska y de reggae con la fuerza y el empuje que le caracterizan. “Mucha locura”, como no dejaba de repetir el cantante entre los temas, “mucho corazón” y “libertad”, como consignas que llegaron a todos y cada uno de los presentes y que fueron el nexo de unión con el que todos nos sentimos clandestinos durante algo más de dos horas. Clandestinos e ilegales, pero sobre todo pletóricos de ritmo y de música, la que no faltó durante ningún momento de su actuación.

Broche de oro, como cabía esperar desde que se anunció su paso por España en mitad de su gira La Ventura y sobre todo, un más que merecido cierre a unas jornadas musicales que habían empezado ya con la misma calidad y una gran afluencia de público para ver al gran violinista Ara Malikian, que se encargaba el jueves de la apertura del festival por el que han pasado también artistas como Paxariño, Carmen París, Zoobazar, Barcelona Gipsy Klezmer Orchestra, Rasha, Amir, Vegetal Jam y Ebony Quintet.

Y si el cierre, con un Manu Chao que se salía en todo momento, fue apoteósico, no podemos dejar de mencionar la emotiva apertura del libanés de origen armenio, Ara Malikian, que puso en pie a una también abarrotada Plaza de las 3 Culturas a la que deleitó durante algo más de hora y media con un repertorio que supuso un viaje musical al través del tiempo de de las fronteras, aunque, entre las cuerdas del violín de Ara Malikian, no hay fronteras ni de espacio ni de tiempo.

Mencionar también el magnífico concierto de Paxariño al que siguieron Zoobazar y Carmen París llevando una gran calidad a esa plaza que, durante tres noches consecutivas, ha sido el punto de encuentro de personas llegadas desde todos los puntos de España a un festival, que, en diez años, ha tenido la capacidad de afianzarse como una de las grandes referencias en lo que a festivales se refiere en nuestro país. Esperemos que cumplan muchas más ediciones, con la misma calidad y el mismo espíritu de compartir cultura, bueno Culturas, nada menos que tres, desde y pare el resto del mundo.

Crónica: María Villa
Fotos: Adolfo Contreras (FOL CONTRERAS) y María Villa

Más fotos en: FOL CONTRERAS - MANU CHAO