En el epicentro de la música granadina, Sala Planta Baja, bien rodeada de un cada vez más numeroso público,
Mäbu llegó ayer a la ciudad diez (once
ya) años más madura que cuando empezó. Diez años son los que han transcurrido
desde que el grupo formado por María Blanco, Txarlie Solano, César Uña y, en
los primeros créditos, también se encontraban los nombres de Daniel y Aridai. Actualmente,
sólo los dos primeros siguen formando parte de Mabü desde su origen.
Diez años que han dado para muchos temas bonitos y un nuevo
trabajo “Décimo”, grabado en directo
en Estudio Uno (Colmenar Viejo), en el que han colaborado artistas de la talla
de Rozalen, Izal, Rayden, Iseo y otros cuantos más, con la emotiva y necesaria
participación de Estíbaliz Uranga (Sergio y Estíbaliz, Mocedades), madre de
María Blanco, con quien canta uno de los temas más dulces “Buenos días”.
Diez años que han dado para cuatro trabajos en los que hemos
asistido a la evolución personal y como cantante de María. Queda muy atrás su
primer ep “Hallo”, preludio de su primer larga duración “Buenos días”.También atrás la María pizpireta que llenaba el mundo de lana de color desde “Con mi voz”, un tema que ayer sonó en
una versión de sí mismo, cambiado, más maduro, como ella misma, como el grupo.
Lo que no ha cambiado en absoluto es la simpatía de María Blanco, siempre cercana,
agradecida, transmitiendo toda la dulzura que percibimos en su voz,
especialmente cuando llega el momento de dar las gracias al público y a la
gente que hace posible que día a día todo siga adelante. Junto a tan importante
canción en su carrera musical, no faltaron por supuesto en “Hallo” que fue su saludo para entrar en
el mundo de la música, “La locura”, “Cara triste”, “Los viajes con Sam” o “Los
amantes”, que sirvió para poner punto y final a un concierto emotivo y lleno de
momento mágicos.
Entre medias, la conocida versión que hace el grupo de “Espérame
en el cielo”, que registraron en su anterior álbum “Buenaventura” y una versión de “Por qué te vas” (Jeanette) que, en
voz de María Blanco sonó maravillosa. Tanto como su “Quédate a dormir”, que en
el disco canta junto a Marlango y, en directo, invitó al público a sentirse
partícipe del tema y cantarlo junto a ella, recibiendo una magnífica respuesta
por parte de los asistentes, que cantaron y, además, lo hicieron muy bien.
Como base perfecta para tan maravillosa voz, la guitarra certera
y precisa de Txarlie Solano
dibujando colores y texturas a unos temas que han aguantado bien el paso del
tiempo e incluso, hoy en día, suenan más frescos que en su primera grabación.
Canciones como las de su tercer trabajo “Detrás
de las luces” del que extrajeron “Caimán”, con una rítmica tan alegre como
tuvo hace seis años. Porque, al fin y al cabo, el concierto de ayer nos resumía
diez años de carrera en hora y media de actuación.
Hora y media en la que también hubo tiempo de contar cosas sobre
el tiempo transcurrido desde que Mäbu
saltara por primera vez a los escenarios, su primera visita a Granada, en La Tertulia para una treintena de
personas (curiosamente, el día antes Zahara dijo exactamente lo mismo en su concierto)
y para dedicarle unas bonitas palabras a Morgan que, no muy lejos de
Planta Baja, también estaba de paso por Granada con su gira presentación de “Air”
y que comparte con ella el tema “Cara triste”. Lástima no haber podido
disfrutar de las dos juntas en vez de perdernos alguna por separado.
Crónica y fotos: María Villa
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