Steve Smyth + Tuya – Sala Heliogàbal. Barcelona, 15/07/2012. 

El show que pudimos ver ayer por la noche en la pequeñísima Sala Heliogàbal de Barcelona gracias a Atmósfera13 y Tramando Producciones fue de esos tan extraños, demasiado extraños, en los que sientes que acabas de ver algo especial. Siempre había tenido curiosidad por cómo se podrían haber sentido los asistentes al mítico show de Jeff Buckley en el Sin-é. Pues bien, sin querer exagerar y salvando las distancias, creo que a día de hoy ya me puedo hacer una idea bastante aproximada. 

Tuya, o lo que es lo mismo, el proyecto en solitario de David T. Ginzo, fue el encargado de abrir la velada. A lo largo de los, aproximadamente, cincuenta minutos que duró su actuación fue desgranando temas como Dark Down, Pictures & Flowers o Never Vacation, además de estrenar una versión de una canción del cantautor Chicho Sánchez Ferlosio que, según explicó Ginzo, acababa de grabar con Fernando Alfaro y que resultaba de lo más apropiado con la que está cayendo. La sensación fue en general buena pero poder revisitar esos temas en su versión eléctrica, en este caso se hace necesario para poder hacerse una mejor idea.

Alrededor de las nueve y media arrancaba Smyth su show con el que es su tema más llamativo, el teatral Barbiturate Cowboy and his Dark Horses y, a partir de ese momento, todo lo demás simplemente desapareció. 

El australiano venía a presentarnos el que es su primer trabajo, el larga duración Release, publicado en 2011. Un disco en el que conjuga blues y pop-rock alternativo a partes iguales. La versatilidad de Smyth queda demostrada en un álbum en el que se pasa de la teatralidad, a lo Waits, a la delicadeza más absoluta en cuestión de minutos. Un disco con mucho potencial, pero no perfecto. Una tenía la sensación de que le faltaba alguna cosa y, está claro que esa cosa es lo que ofrece Smyth en directo. Temas como A Hopeless Feminist son endurecidos en vivo como lo hacía Buckley con su Eternal Life, llevándolos a otro nivel. Mención a parte merecen las dos versiones que el australiano nos ofreció, una calenturienta Summertime y la enorme Sylvie de Leadbelly, que va de un arranque tenebroso a lo Harry Powell de La Noche del Cazador, a la ironía al cantar aquello de “me trajiste café, me trajiste té pero nunca me trajiste las llaves de la celda”. Sencillamente fantástico. 

A nivel escénico Smyth tiene mucha fuerza, aunque por momentos se muestre tímido y tenga que ayudarse de su libretita para poder dirigir unas palabras en catalán al público, idioma en el que se propuso presentar todos sus temas hasta el punto de dedicar No Man's Land a Cataluña. 

En definitiva, un show en el que resulta muy difícil destacar un tema por encima de otro, que fue de menos a más, y un artista al que dentro de poco no me extrañaría ver en los carteles de festivales como el Azkena o el Primavera Sound, y no por una entrada de seis euros precisamente. 

Si estáis cerca de Igualada (Barcelona), todavía tenéis tiempo de ver a Steve Smyth en acción, ya que estará tocando en el Hot Blues mañana 17 de julio. La entrada es totalmente gratuita. 

A continuación os dejamos las fotos del concierto, aunque ya os digo que no hacen justicia a lo que vivimos.