Entrando ya en materia, a las 20:45 The Cubical salieron al escenario de la sala Monasterio a darlo todo ante un público llamémosle reducido, una treintena de personas fueron las que se reunieron para bailar al son de los de Liverpool.

El grupo, con dos álbumes en su poder, no son precisamente nuevos por estas tierras, de hecho estuvieron tocando por España en febrero de este mismo año y actuaron en el Azkena Rock Festival de 2010. Así pues, el combo de garaje-blues británico venía precedido por una gran reputación como banda de directo y, una vez vistos, debo corroborar esa reputación.

El concierto empezó con Dirty Shame, canción perteneciente a su último disco It ain’t human (2011), para continuar haciendo un repaso bastante exhaustivo a sus dos discos. En la hora y cuarto que duró el concierto sonaron Edward The confessor, In the night, Like me, I’m a Peacock, Don’t treat me bad, Great White Lie o Walking around Jesus. Además presentaron tres temas nuevos, uno de ellos en primicia para los presentes. Asombra lo reconocibles y pegadizas que son las canciones de The Cubical, todas ellas singles potenciales. Lo comprobaréis vosotros mismos si le echáis un vistazo al vídeo que os proponemos al final de este artículo, en él podréis presenciar el tema que estrenó la banda en Barcelona, imposible quitárselo de la cabeza des del primer momento.

De su actuación destacaría los aires sesenteros y carnavalescos de sus canciones, los bailoteos y la voz de Dan Wilson (vocalista), la energía de Alex Gavahan (guitarra) y la precisión de Craig Bell y Mark Percy (bajo y batería respectivamente).