Al principio eran muy pequeños pues los cantantes interpretaban su canción delante del palo con el micrófono y las coreografías eran escasas y muy tímidas. Aunque es cierto que ya desde 1957 y con intermitencias el fondo de escenario llevaba una decoración representativa del país.

En 1963 es la primera y única vez que se observa a los cantantes interpretar sus temas sin micrófonos visibles y ambientaciones distintas, algo adelantado para la época. La BBC dio ese paso. Otro aspecto fundamental es crear escenarios "temáticos" con el logotipo de Eurovisión (1965, 1968), en forma de iceberg (1986), de drakkar (1992), con aire a Cinecittà (1991), plataforma petrolífera (1996), representando lagos (2002)... Con el color que surge en 1968 (aunque en España se verá en 1973) se abren nuevos horizontes y las luces dan más juego.

En 1988 surge un escenario revolucionario donde el ordenador es primordial, al igual que en 1996. Pero el fin de siglo da lugar a unos recintos que acogen a miles de personas siendo el más grande el Parken danés, que llegó a acoger a unas treinta mil personas. A partir de 2003 la ambientación no se detiene en los fondos sino que el suelo será otro referente. Toda una revolución. El recinto al principio eran estudios de televisión con la gente, muy mayor, visto hoy, muy formal y sentada. Luego se llegó a celebrar en palacios como Viena 1967 o Madrid 1969.

El escenario donde se han celebrado más festivales ha sido el Point Theater de Dublin que acogió los festivales de 1994, 1995 y 1997. Con el cambio de centuria y el auge de los eurofans se hicieron recintos de nueva planta los Arena o los Palace con más gente joven y más informalidad y colorido de banderas. Las ciudades que acogían el evento no eran grandes, de hecho ni eran las capitales de los países. De ahí que conocíesemos ciudades poco nombradas como Hilversun (Países Bajos), Harrogate (Reino Unido).

Hubo el caso de Millstreet (Irlanda), que fue un capricho de un millonario de la isla esmeralda que quiso que se celebrase en su ciudad. Otras ciudades coquetas fueron Francfort, Edimburgo, Brighton, Bergen, Goteborg, Dusseldorf. Pero poco a poco se fueron imponiendo las capitales.