Rumba, son, merengue, cumbia, unas gotas de reggae y fuerza, mucha fuerza, en las canciones de La Rana Mariana, que igual por las ganas que ponen en escena
hicieron que el sol dejara de lado su habitual timidez durante estas jornadas y se asomara durante la hora escasa que comparecieron en el Escenario Legendario,
coincidiendo con otros algo más fieros y comprometidos Hora Zulú, rap metal con
la antena del Escenario Metálika mirando al sur y con ‘Mis barraqueras’ como
canción emblema de un nuevo trabajo que les abrirá fronteras dentro de nada si
continúan por la senda iniciada hace una década y si Paco Luque, uno de los
grandes guitarristas de la escena actual, sigue consiguiendo ese sonido tan
devastador. Después, los valencianos de La Pulquería demostraron que se puede
hacer fusión sin caer en el cliché, un problema común a muchas de las bandas
que desfilan por este tipo de eventos, y que la música mexicana y las raíces
latinas en general están mucho más cerca de nosotros de lo que pensamos. Sin
embargo, Bongo Botrako, con su colorista puesta en escena y su reciente disco, ‘Todos los días sale el sol’, a punto para ser presentado en sociedad, no consiguieron
que el astro rey nos iluminara de nuevo con su presencia, pero queda entre los
grandes momentos de la tarde su despliegue de vientos y sus letras optimistas,
casi ya innecesarias ante la gran afluencia de público que a esas alturas empezaba a convertir el recinto en el hervidero en que se transformó poco
después. Pero claro, como había que estar en misa y repicando, nos desplazamos
de nuevo al entorno heavy donde otra
leyenda de aquella época dorada, los ochenta sobre todo, ponía los pies en el
suelo y el grito en el cielo, y nunca mejor dicho, porque el amigo Fortu sigue
extrayendo chillones gorgoritos de su garganta para entonar de nuevo clasicazos
como ‘La raya’, de su álbum tal vez más importante, aquel ‘El que más’ que,
como reconocía luego Paco Laguna, su lugarteniente más longevo, fue el trabajo
que les ayudó a formar parte de la pequeña gran historia del metal nacional.
¿Viejas glorias o dinasaurios que se empeñan en envejecer con dignidad? A
juzgar por los coros que el respetable secundaba y la presencia casi “raphaeliana”
de su líder (con todos los respetos al monstruo de Linares, que nada tiene que
ver con esto, no me seais mal pensados), tan histriónico como de costumbre, hay
Obús para rato, y nosotros nos alegraríamos de ello.
Antes de encontrarnos por fin con el señor Mercado, quizá la
razón más importante para acercarnos a Villarrobledo, nos pasamos por el
Escenario Babilonia para comprobar que, pese a todo, el hip-hop sigue siendo la hermana pobre en este tipo de reuniones
musicales, y no es por falta de atractivos, sino porque la competencia es mucha
y en este caso más que desleal. Los jovencísimos Ziontifik, un colectivo de djs y mcs (disculpad la jerga) que juega a remezclar sus propios temas e
improvisar sobre sus propias letras, fueron la introducción a las grandes
estrellas SFDK y El Chojin, ambos consolidados en el trono de los capitostes
del rap nacional. Pero como estábamos por otras labores y la veteranía es un
grado, teníamos que dar buena cuenta de las órdenes de los dos capitanes del
cotarro: por un lado, Rosendo, que en su formato habitual de trío (nunca ha necesitado aditivos) acudió
puntual a la cita con un repertorio mutilado por las obligaciones del horario y
su acostumbrado porte virtuoso a la guitarra. No olvidemos que este señor, que
bordea los sesenta, ha sido premiado hasta por el Rey, creo que en la única
ocasión en que lo hemos visto ataviado con un impoluto traje, y que de no haber
formado parte de Ñu y sobre todo de Leño, muchos de los grupos que hemos visto
y que veremos en este y otros festivales ni siquiera habrían decidido dedicarse
a esto. ‘¡Y dale!’ (ver el vídeo de abajo que grabamos nada más pisar el escenario) arrancó los motores para que sus puyas encontraran de nuevo
el blanco perfecto en ‘Different, eso sí’ y ‘No son gigantes’, temas incluidos
en discos aparentemente menores pero igual de efectivos en su voz, que también
repasó su última entrega, ‘A veces cuesta llegar al estribillo’, sin el menor
reparo en gritar ‘A moco tendido’ y saludar a unos fieles, e incluso a los que
no lo son tanto, que a esas alturas ya rendían la debida pleitesía al autor del
célebre solo de ‘Maneras de vivir’, tal vez el himno por excelencia del rock
duro español de siempre.
Mención aparte, y por eso ya estais en otro párrafo, merece
la presencia a duras penas de Yosi y sus secuaces poco después del de
Carabanchel, y digo a duras penas porque los de Orense bastante tienen con
conservar la corona de mejor banda en directo que les han otorgado varias
publicaciones del gremio, que eso lo hacen sin problemas, sobre todo si cuentan
con la guitarra del enorme Alberto Cereijo como argumento, porque si hablamos
del anárquico líder y su tendencia a beberse todo lo que tenga a mano y más
allá, tendríamos que abrir otro capítulo que para nada entusiasmaría a sus
fans. O sí, porque a fin de cuentas tal vez sea eso lo que lo hace grande de
cara a la galería, pese a que cada vez le cueste más vocalizar y hacer que
himnos ajenos de los que tan bien se adueñaron como ‘Palabras para Julia’
suenen algo menos encorsetados. Pese a todo, uno de los momentazos de la noche
y de toda esta edición.
La enésima coincidencia de horarios nos hizo privarnos de
parte del nuevo repertorio de Sôber, en el que los hermanos Escobedo, tan
clónicos físicamente como casi lo fueron en sus respectivas encarnaciones de
Skizoo y Savia, no se apartan ni un ápice del guión y se dedican a lo que
saben: afilar las cuerdas, agravar los punteos y machacar la base rítmica sin
la menor piedad. Sabíamos que eran buenos, pero aún no conocíamos sus temas más
recientes y los de ‘Superbia’ son sencillamente tremendos. Rezando estamos para
que esta reencarnación de los madrileños no desemboque en pasados desencuentros,
el rock los necesita vivitos y coleando, y abajo teneis un video que lo atestigua. Lo que no sé es si el mundo necesita a
una banda como Canteca de Macao, a los que probablemente tanta grandilocuencia
en su puesta en escena, con trajes de época incluidos, les perjudique más que
otra cosa, y no es porque sean malos músicos, todo lo contrario, sino porque la
pregunta “¿cuántas bandas por el estilo
hablan de las injusticias del mundo, el amor universal, la discriminación
femenina y la integración entre los pueblos?” flota en el ambiente cada vez
que Ana, la vocalista, entona sus aflamencados cánticos e intenta caldear el
ambiente –y lo consigue- que crean los vientos, las percusiones y los aires
étnicos de su banda. Quizá les haga falta una discografía más amplia y algo de
perspectiva para conseguir transmitir
algo más que eficacia instrumental. Y como nota a pie de página metida en medio
del texto, una cuestión que quedará en el aire: ¿Es necesario que alguien que
aparentemente transmite tan buen rollo y que hace bandera de la libertad y el
compartir ponga tantas trabas para fotografiar su concierto? Pero eso es otra
cosa que nada tiene que ver con esta crónica. Y luego El Puchero del Hortelano,
recién aterrizados de Argentina, se encargaron de echar el telón con otra dosis
de fusión bien entendida pero hinchada de lugares comunes.
Antes de marcharnos, teníamos que apuntar las buenas maneras
de la banda de Huecco y de su disco ‘Dame vida’, un multicultural tratado de músicas
hechas con el corazón que consiguió que muchos se olvidaran del frío de esa
hora de la madrugada, y cómo no, corroborar que Hamlet son una de las bandas
con más mala suerte de este país. No sólo porque llevan en esto más de veinte
años sin sonar prácticamente en ningún sitio y se han convertido en una referencia
para muchos grupos incipientes, sino porque su sonido permanece robusto, brutal
y apasionado. Por algo J. Molly es uno de los grandes vocalistas del hard-rock e ‘Insomnio’ un álbum clave en
su evolución. Y hablando de evolucionar, como ya las fuerzas y las neuronas no
daban para más y nos dimos por satisfechos con tres jornadas disfrutadas y
sufridas a partes iguales (la parte negativa siempre corrió a cargo de la
climatología), os dejo algunos datos oficiales para que os hagáis una idea de
lo que os habeis perdido, y para que el próximo año estéis atentos a vuestro
rincón alquímico desde el que prometemos volver a contaros, espero que con más
fortuna que en esta edición, desde el primer hasta el último concierto, llueva,
nieve, truene o amenace tempestad. Y no lo olvidéis: la música es una actitud,
amigos.
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Durante los cuatro días de conciertos han
asistido al festival más de 220.000 personas.
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En la jornada del sábado, la actuación más
multitudinaria fue la de La Pegatina, y la más destacada en notas de prensa la
de Boikot.
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El concierto de La Fuga fue el que registró
mayor afluencia de público durante la jornada del domingo.
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El Escenario Viña Clon cerró cada jornada con la
presencia de varias bandas tributo a Metallica, Los Ramones, Nirvana,
Extremoduro, Fito y Fitipaldis y Misfits.
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El cartel ha incluido un total de 91 grupos
distribuidos en cuatro escenarios.
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El evento ha generado 3.200 puestos de trabajo y
12 millones de euros como impacto económico para la provincia y la localidad de
Villarrobledo.
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La media de asistencia diaria ha sido de 60.000
personas, aparte de las más de 12.000 que ambientaban los alrededores del
recinto.
LA RANA MARIANA
HORA ZULÚ
ZIONTIFIK
BONGO BOTRAKO
OBÚS
ROSENDO
CANTECA DE MACAO
SÔBER
HAMLET
LOS SUAVES
HUECCO
Más info: http://www.vina-rock.com/
Texto: JJ Stone
Fotografías: Raisa McCartney
8 Comentarios
rosendo es el amo. Leventó el animo de todos los que estabamos alli y da igual que nos lloviese encima o tuviesemos hambre y tuviesemos q ir urgentemente al baño que ninguno de nosotros se lo perdio.. increible como toca
ResponderEliminarHora Zulú se merecen un festival para ellos solos. Algunos grupos deberían de aprender de ellos xq tienen mucho que enseñar.
ResponderEliminarRosendo nos dejó emocionados, las fotos molan tb y Yosi salió borracho, jajaja, un festival como solo ellos lo pueden tocar.
ResponderEliminarBuenas!!
ResponderEliminarMe gustaría saber quién te puso pegas para fotografíar/grabar el concierto de Canteca de Macao. Por nuestra parte, dejamos grabar y hacer fotos desde que llegamos a acreditaciones hasta que nos fuimos del festival, incluso en el camerino, y el lateral del escenario estaba repleto de gente haciendo fotos, aún cuando las pulseras de prensa teóricamente sólo daban acceso al foso.
Que no te gustase nuestro concierto me da igual, para gustos los colores, pero la pulla para hacernos quedar de guays la verdad es que no me ha gustado nada.
Un saludo,
Zulo
Canteca de Macao
Hola, Zulo!
ResponderEliminarEn primer lugar, gracias por leernos, pero si lo haces con atención verás que en ningún momento ponemos en duda vuestra valía como banda, es más, nos pareceis un gran grupo, pero ya sabes que no estais en esto para gustarle a todo el mundo sino para hacer lo que os sale del alma. En la misma medida, nosotros tampoco estamos aquí para que nuestros artículos y crónicas sean siempre aplaudidos. Dar una opinión en un medio público como este, sin ánimo de ofender a nadie, es algo que corre muchos riesgos, entre ellos el de la mala interpretación, como en este caso.
Después de cubrir un festival de esta categoría, viendo una media de 10 o 12 conciertos diarios y no encontrando traba alguna para realizar nuestro trabajo, salvo los dos o tres artistas que esperábamos y que no supusieron ninguna sorpresa, en vuestro concierto sí que fue algo inesperado que nos pusieran tantas condiciones. Si fue responsabilidad vuestra o no es otra cuestión, pero entenderás que si llegamos al escenario con todas las ganas e ilusión por haceros el reportaje que mereceis y alguien nos dice que hay ciertas limitaciones, lo lógico es que pensemos que la orden parte de la propia banda. Insisto: tus quejas son comprensibles, pero deberías dirigirlas a la persona adecuada.
Nosotros como medio de comunicación únicamente reflejamos lo que nos ocurrió in situ, si has pensado en algún momento que tenemos algo personal contra vosotros, te pedimos disculpas por no ser capaces de expresarnos con toda la claridad posible. Tal vez el cansancio y la saturación de conciertos después de tres días intensos de festival no nos hiciera apreciar las cosas con justicia, pero no pretendemos -ni queremos que vosotros hagais lo mismo- lanzar pulla alguna contra nadie. Hay muchas otras crónicas en la red donde Canteca de Macao sois ampliamente ensalzados, y no seremos nosotros quienes las discutamos.
Créeme que si averiguais de dónde y de quién partió la orden de limitar las fotografías a la prensa (de los fans no hablo), estaremos encantados de cotejar la información con nuestros lectores, pues la primera ley del periodismo es la veracidad.
Un saludo,
Alquimia Sonora
Hola JJ Stone. Soy Chiki,cantante, compositor y guitarra de Canteca.
ResponderEliminarYa escribí a la fotografa para preguntarla quien le nego el acceso para hacer fotos, pero no he obtenido respuesta.
Como dice Zulo, nunca hemos negado una foto a ningún periodista, nos resulta bastante extraño. Había gente en el lateral y después del concierto en la puerta del camerino. No entiendo quien os pudo decir nada, pero hoy mismo lo preguntaré. Lo que si te digo, es que si alguien dijo algo,me extraña muchísimo que sea de la banda, ya que no es nuestra manera de hacer las cosas, más bien todo lo contrario.
Llevamos mucho esfuerzo y transparencia en este proyecto y sobre todo este año como para leer una crítica que nos llame grandilocuentes. Tendré que por lo menos rebatirlo. No se si sabes como hemos sacado el disco este año y de que manera, y el esfuerzo que eso ha implicado. Y por cierto, el vestuario forma parte del videoclip que hemos grabado de presentación de este disco y de esta gira, por eso salimos en las dos primeras canciones con el, para que haya un sentido a todo.
Gracias por contestarle a Zulo y de veras que intentare enterarme quien os nego el acceso.
Un saludo.
He aquí la fotógrafa y te contesté esta mañana por un mensaje privado. No me dejaron usar el flash y me hacía falta porque era de noche. ¿Quién? La organización del evento. No dudamos de vosotros como banda pero si de los que os representan o la organización de allí. La "culpa" es de quien diese esa orden, ya está.
ResponderEliminarda igual el tiempo que lleve: grande obús y cada uno de sus componentes en especial el cantante
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