Carl Cox será quien cierre el escenario mundo, donde antes habrán pasado Calvin Harris, Amaia Montero y Swedish House Mafia. Es de entender que ante grandes males haya grandes remedios, y nunca mejor dicho lo de grande, pero me pregunto que pasaba por la cabeza de quien pensó en que un buen sustituto de Rihanna era Carl Cox. 

Cuando un cabeza de cartel (o muy cabeza de cartel) te cancela a pocos días su actuación, las opciones son pocas y casi todas malas, pero sinceramente era quizá el último sustituto para la de Barbados que nadie se esperaba.
Quiero dejar claro que no es un crítica hacia la organización, ninguna culpa tienen ellos de que fallezca la abuela de Rihanna, y por eso quiero destacar el poco tiempo de reacción que han tenido y que tener a Carl Cox en un festival no es ninguna tontería, pero insisto en que me gustaría poder conocer esas negociaciones que se han llevado a cabo para pensar y decidir quien sustituía a la perla negra.

Chapeu para la organización de Rock in rio por avisar, por haber sabido reaccionar ante el problema consiguiendo un nuevo cabeza de cartel, y por saber que no pueden manchar su imagen no devolviendo el importe de las entradas a los fans de Rihanna. Seguramente en la entrada del festival haya millones de cláusulas escritas con el tamaño igual que el de un contrato de una hipoteca en las que dice que no están obligados a devolver el dinero, pero moralmente y si no quieren cargarse su festival, debían hacerlo. Acierto.