'77 + Howlin' Rain, BAM. Barcelona, 21/09/2012. 

Fantástica noche de rock la que vivimos el pasado día 21 de septiembre en la Plaza Real de Barcelona gracias al BAM y, sobre todo, a '77 y a Howlin' Rain. Como punto negativo sólo destacar esa marabunta de lateros que cada dos por tres te “sacaban” del concierto a base de congelarte el brazo con latas mojadas y su cántico de “cerveza-beer”, una auténtica pesadilla. 

A `77 no les había escuchado anteriormente aunque los buenos comentarios acerca de su último concierto en La [2] de Apolo habían sido muchos. Su estilo, fuertemente influenciado por AC/DC, los emparenta con bandas como Supagroup, Airbourne o los últimos Hellacopters, hasta el punto que Nicke Royale, ex-vocalista de Hellacopters, participó en la grabación de su último trabajo, High Decibels (2011), y Dregen, ex-guitarra de The Hellacopters y miembro de Backyard Babies, ha tocado con ellos en directo. 

Si hay una palabra que defina el show que dieron los '77 el pasado viernes esa es nervio, los barceloneses ofrecieron un concierto muy compacto y enérgico, sin parones, que consiguió crear un gran ambiente de fiesta no sólo entre sus fans, congregados en las primeras filas, sino entre los espontáneos que se acercaron a la Plaza Real. Fue curioso ver como una señora con aspecto de regidora de servicios sociales del Ayuntamiento, con todos mis respetos, lo daba todo delante nuestro y pedía “otra otra” antes de los bises. Que sí, que el hard-rock puede ser para todos los públicos, ojalá ocasiones como esta sirviesen para que más gente se acercase a los clubes el resto del año, pero me temo que va a ser que no...

Y llegamos a las once de la noche y ya estamos situados entre las primeras filas para ver el show que me había sacado de casa. Al igual que '77, las influencias musicales de Howlin' Rain hay que buscarlas en la década de los setenta, pero mientras que los primeros beben del hard-rock de AC/DC, Howlin' Rain lo hacen de la psicodelia y el southern rock. He de reconocer que, hasta el momento, no les había prestado demasiada atención, no sé porqué siempre había ido dejando para luego la escucha de sus discos, sin embargo fue escuchar The Russian Wilds, su quinto LP publicado en 2012, y hacer BOOM! Allman Brothers, Lynyrd Skynyrd, The Black Crowes, psicodelia, soul, jazz... y todo eso en once temas. 

En esta ocasión, los de San Francisco venían sin su teclista Joel Robinow pero, visto el resultado, tampoco se notó demasiado su ausencia. Ethan Miller agarró las riendas del show desde el minuto uno y se convirtió en el punto focal sobre el escenario hasta el final. Howlin' Rain arrancaron con la que, para mi, es una de las mejores canciones de su último trabajo, Phantom of the Valley, y no decepcionaron en absoluto, cómo hacerlo con un temazo como ese en el que se dan la mano Skynyrd y el latin jazz de una forma completamente natural. A ésta le siguió el primer tema de The Russian Wilds, Self Made Man, y a partir de ahí dejé de “contar”. Aunque en la zona donde nos encontrábamos el sonido no acababa de llegar demasiado bien, los norte-americanos cubrieron sobradamente las expectativas, aunque podrían haber estirado el concierto un poquito más, ochenta minutos son poquísimos. A nivel escénico, como comentaba anteriormente, el que se lleva el protagonismo es sin duda Miller, completamente metido en la música, te arrastra con él sin remedio. Pero esos desarrollos instrumentales son obra de un guitarra, un bajo y un batería enormes que saben mantener tu atención en todo momento. 

Y hasta aquí la crónica alquimista de lo que sucedió en el escenario Garatge del BAM el viernes 21 de septiembre, lamentablemente no pudimos asistir al concierto que cerraba la noche, el de los californianos The Dream Syndicate. 

Os dejamos con algunas fotos de los shows de '77 y Howlin' Rain, esperamos que las disfrutéis: