Desde el jueves pasado y hasta ayer domingo, se ha desarrollado sobre el escenario de la Sala Russafa, organizado por el sello Malatesta Records la segunda edición del Festival Directos en Escena. Un ciclo de conciertos con un original hilo conductor: la importancia de las letras en la composición musical. Si bien se suele tener a éstas como complemento accesorio en la creación de canciones, no cabe la menor duda de la importancia que revisten para completar el proceso creativo.
Para refrendar esta actitud reivindicativa de la importancia de lo escrito, los organizadores han seleccionado una serie de bandas y solistas que tienen en común su capacidad para expresarse tanto con letras como con notas. Hugo Mas, Luna y panorama de los insectos, Galope, Mr. Pefumme y las bestias polacas, Spheniscidae, Sr. Mostaza, Johnny B. Zero y el gran Javier Corcobado formaban un cartel heterogéneo en lo musical pero que comparten la perspectiva literaria del festival.
En un evento en el que la palabra tiene la misma importancia que la música, nada más apropiado que servirse de ella misma para reivindicar la importancia de su papel. Por ello el sábado por la mañana se celebró una mesa redonda moderada por el periodista Rafa Cervera y que contó con la presencia de Carolina Otero (Lülla, The Someone Elses), Pablo Maronda (Maronda), Javier Corcobado y Cándida bajo el título "Dónde reside la importancia de la letra en una canción".
La segunda jornada del II Festival Directos en Escena, celebrada el pasado viernes, conjugó dos propuestas diametralmente opuestas pero con un punto en común. Si en lo musical nada más alejado entre sí que el rock alternativo que practica Galope y la música de raíz popular de Mr. Perfumme, ambos se distinguen por la originalidad de su fórmula y su voluntad por ocupar posiciones marginales. Comparten un honesto y personal modo de entender sus creaciones sonoras que les sitúan de forma voluntaria en terrenos poco accesibles para paladares acostumbrados a sabores más comerciales.
Galope, el proyecto en solitario de Javier Marcos inició la sesión del viernes huyendo de lugares comunes y transportándonos a periferias poco transitadas pero repletas de intensa lírica. Es miembro de dos de las bandas más apreciadas de la escena local: junto con Gonzalo Fuster (guitarra), David Campillos (bajo) y Juan Terol (batería) completa Trinidad con los que acaba de publicar su último trabajo. Participa también, tocando la batería en Spheniscidae, el proyecto liderado por Iñigo Soler que editó el pasado año "La historia inempezable".
Sobre el escenario desnudo de la Sala Russafa, con el único acompañamiento de su guitarra y pedales, Javier Marcos hizo una auténtica demostración de convicción en su propuesta musical que cautivó a todos los presentes. El ambiente teatral donde se desarrollaba el concierto nos invitaba a evocar la figura de un naufrago que se vale de los recursos mínimos a su alcance y que con ellos consigue desafiar a las fuerzas adversas. Y no sólo vencerlas, sino también dominarlas. El resultado fue espectacular. Temas que se construyen por la adición de sutiles fraseos de guitarra, a veces una secuencia de acordes o un leve punteo, llevaban en su simplicidad toda su capacidad de seducción hipnótica. Pasajes sonoros despojados de inútiles aderezos sobre los que en cualquier momento destellaba el rayo, la furia contenida. Galope consigue modular a golpe de acorde, punteo o uso de pedal no sólo la estructura del tema sino también el estado anímico del oyente.
"Las sales de baño", "La espalda mojada", "Arden las casas", "La misma huida" y "Ya no me hablo" conformaron su primera entrega en forma de maqueta disponible en myspace. Temas que conjugan un intimismo minimalista con abruptos cambios de ritmo y fraseos de guitarra que unen el pop más delicado con el postrock más hiriente. Esquirlas de cristal que destellan a la luz pero que dejan heridas. Cuando finalizó el set, antes de que los pocos espectadores congregados juntasen sus manos para aplaudir se oyó una voz desde el fondo del patio de butacas: ¡Grande!
Mr. Perfumme y las bestias polacas aterrizaron sobre el escenario de la Sala Russafa para curarnos las heridas abiertas con ese repertorio que deambula, haciendo ebrias eses, entre el lamento y la celebración, entre el callado reproche amoroso y el grito de alegría desatada. "Hagamos el amor" fue el primer tema que abordaron, como declaración de intenciones, para seguir con "Amoramoramor". Tras "Espiderman", "Estranha" y "Jogo", los que no habíamos visto con anterioridad a la banda de David Pascual Huertas ya nos habíamos hecho una composición de lugar de lo que albergaban las maletas de estos músicos de voluntad trashumante.
Su propuesta de un largo viaje nos transportaba de un hemisferio a otro, desde la melancólica Lisboa que evocaba la profunda voz de Azucena hasta el Buenos Aires canalla que evoca Mr. Perfumme. Aristócratas de arrabal con espíritu zíngaro, el cuarteto cuajó una actuación que alternaba los tempos lentos, apenas voz recitando, con el aullido que celebra gozoso la alegría de vivir. "Melodrama", "Suicidios" o "Caen ciudades" temas de títulos que evocan tragedias, esconden tras su aparente dramatismo hermosas canciones para tararear en un solitario deambular por callejuelas con luz de verbena. Así, entre fado y tango discurrió la tarde para finalizar con "Zidane" , pieza dadaísta que resumió la sensata locura que practican Mr. Pefumme y sus acólitos. Nos os perdáis su próximo viaje.
FOTOS: MARÍA VAL
http://www.myspace.com/rapidogalope
http://mrperfumme.bandcamp.com/
http://malatestarecords.com/
http://www.salarussafa.es/
FOTOS: MARÍA VAL
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