Estrenamos en exclusiva el nuevo trabajo de Ambros Chapel, "Brazil", tema extraído de su próximo disco, "The last memories".

"The last memories", tercer disco de la banda valenciana se publicará este mes de diciembre. Estrenamos como adelanto "Brazil" en un exquisito vídeo realizado por Cat&Gos Films.

El tercer álbum de una banda es determinante en su trayectoria. Si bien los dos primeros suelen ser el resultado de todas las referencias sonoras que acumulan los componentes del grupo desde su primera relación con la música, su tercera entrega suele ser la prueba de fuego que ratifica si el discurso artístico de la banda se ha agotado con sus trabajos previos o aún tienen algo que decir. Ante esta situación suele haber dos planteamientos: las canciones se convierten en autoplagios que confirman una sequía creativa o, cuanto menos, una cómoda autocomplacencia con fórmulas que han funcionado antes o se opta por una postura más responsable a la vez que arriesgada que implica experimentación, apertura de nuevas trayectorias sonoras y la ampliación de las fronteras compositivas de la banda.

Ambros Chapel han conseguido resolver el compromiso sin abandonar su característico estilo que los convierte en una referencia dentro de la limitada escena post-punk valenciana pero modelando su sonido y sus composiciones para evitar convertirlos en una obra autorreferencial. El abandono de la banda hace aproximadamente un año de su teclista, Vicente Ortiz y la sustitución de su guitarra solista Javier por Oscar preveía novedades en el álbum que confirmaba la madurez creativa del grupo. Aunque Vicente ha colaborado tejiendo con sus teclados esas atmósferas tan características de sus primeros trabajos en tres de los temas incluidos, la ausencia de éste y la incorporación de Oscar, ha primado un sonido más guitarrero, aunque no en el sentido de poderosos riffs de guitarra, si no más bien en el desarrollo de melodías en las que los sutiles punteos de guitarra sustituyen las características teclas y que saben transitar por sendas minimalistas de ligeros punteos hasta fragmentos incendiarios con gusto por el dramatismo y la épica.

"The Last Memories" es el tercer larga duración de Ambros Chapel, banda compuesta por Pablo Casero (guitarra y letrista), Oscar Vadillo (guitarra solista), Alfred Sanchís (bajo) y José Rodríguez (batería). Su última grabación de estudio viene precedida por "Rome" (Malatesta Records), álbum de estreno y "Constants are Changing" (7 Days Music, 2011) su segundo largo. El año pasado editaron en EP en vinilo con tres temas: "The River", "Electric Eye" y "Tears" con su propio sello 7 Days Music.

¿Que novedades encontramos en "The last memories" frente a sus dos brillantes anteriores álbumes, su aclamado debut, "Rome", y su sucesor "Constants are changing"? A nivel compositivo el cuarteto se ha decantado por los temas de tempos medios o lentos, abordando su nueva obra fiel al espacio sonoro que habitan pero bajando el ritmo, prefiriendo temas lentos a la energía de canciones anteriores como "Tears" o "Lovers". "I don't", "Broken" o "Black Dress" son buenos ejemplos de esta nueva cadencia rítmica. Por otro lado, seguros de las canciones, rehuyen de arreglos grandilocuentes y artificios de producción para presentar canciones que brillan en su desnudez estructural, que se sostienen en su esencia rítmica y melódica sin necesidad del auxilio de capas y capas sonoras para disimular carencias que no tienen.

Quizá uno de los rasgos más distintivos de "The last memories" frente a la obra anterior de Ambros Chapel sea el tratamiento de la voz de su cantante solista, Pablo, otra de las señas de identidad de la banda y pilar básico de sus temas. De lenta declamación y grave tesitura, la voz se retira del primer plano como era habitual en temas anteriores y, en perfecta sincronía con el espíritu de las composiciones, se integra como un instrumento más, cediendo protagonismo pero sin renunciar a su papel central en el recitado de esos textos en inglés como es habitual en sus letras. El recuerdo del brillante "Psychocandy" de The Jesus & Mary Chain" me ha venido en repetidas ocasiones a la cabeza escuchando este disco.

En "Black Dress" los coros se suman al protagonismo de las dos guitarras. La guitarra solista siluetea un punteo de una hermosa melodía pone el contrapunto a la labor vocal de Pablo. "Brazil" elegida para el vídeo, tema de largo desarrollo, cinco minutos y con un largo principio de aires lisérgicos sobre el que se superpone la batería y la voz de Pablo con esa tesitura característica e insuflándole a la interpretación un dramatismo próximo al Bowie de su época alemana. Tema difícil, de afiladas aristas y atmósferas frías y solitarias que combina quietud minimalista con momentos incendiarios, pero que demuestra que no están dispuestos a apostar sobre seguro y que en su búsqueda de innovación están dispuestos a recorrer nuevos y comprometidos trayectos. "Solitary man" engaña en su principio lento y, de nuevo, con referencias a Bowie, que no hace presagiar un final de tintes épicos con una guitarra solista que abunda en la distorsión hipnótica, es uno de los que más conmueve.

En "Broken dice", como antaño, la grave voz de Pablo vuelve a tomar el protagonismo planeando sobre la estructura musical para desplegarse en un estribillo obsesivo que teje fraseos próximos a la lisergia del rock progresivo terreno en el que no llega a adentrarse. Una canción que gana según se aproxima a su fin con esa cacofonía final y la voz de Pablo y los coros alzándose sobre ella. "Cellophane" es uno de los cortes que más destaca con esas guitarras que aúllan, que se alternan en abruptos cambios de ritmo con delicados punteos. Es el tema más fácil del álbum y uno de sus momentos más intensos. "Future line" definida por un bajo obsesivo en su inicio se desarrolla como el tema más próximo al pop, eso sí un pop de tintes oscuros y teñido de nuevo por guitarras incendiarias. "I don't" el tema más lento del disco, una letanía sonora con una recitado apenas musitado sobre el que se van alzando aderezos de guitarra para conjugar la pieza más reposada del álbum.

"The lonely fair" con su guitarra arpegiada y su ritmo tranquilo sugiere atmósferas oníricas hasta que su potente estribillo, en uno de esos cambios de ritmo que se suceden en todo el álbum, le da su propio brillo oscuro, antes de volver a sumergirse en las tinieblas. "Situtation" es la pieza más luminosa del álbum, de corte guitarrero y estructura pop con brillantes coros es el corte de más fácil audición sin que por el contrario rehuya el espíritu del álbum. Gran tema. "X" el último track, sirve de epílogo a una obra llena de momentos intensos, donde las canciones muestran su estructura casi desnuda, sin aderezos ni artificios, pero como en el caso de "X" con la autenticidad del post-punk que con tanta sabiduría practican Ambros Chapel. Con ella se cierra un álbum dificil, en ocasiones oscuro pero que los que conocen a la banda sabrán apreciar desde la primera escucha.

El disco ha sido editado en vinilo, en una tirada inicial de trescientas copias numeradas y con tarjeta de descarga digital que ya se pueden reservar en harmonydiscos@ono.com Grabado en Novoestudios en Picassent por Facundo Novo, ha sido masterizado por Mario G. Alberni en Kadifornia estudios Cádiz. La portada cuenta con fotografía de Stella Blasco Berlanga, también correalizadora del vídeo, y diseño gráfico de Llo Bhyf.

"Brazil", el tema escogido para la presentación del álbum es un tema complejo, largo, caracterizado por cambios de ritmos y su querencia hacia parajes sonoros oscuros e inhóspitos pero no por ello carentes de hermosa belleza. En perfecta sintonia con la idea del tema, Cat&Gos  Films o lo que es lo mismo, Stella Blasco Berlanga y Jordi Todolí han rodado una historia en blanco y negro que bebe de las fuentes mismas del mejor cine noir con referencias al "Tercer hombre" de Orson Welles y al cine expresionista alemán, en esta historia de imágenes oscuras y música luminosa.

FOTOGRAFÍAS: STELLA BLASCO BERLANGA

MAS INFO:

http://ambroschapel.bandcamp.com/
https://www.facebook.com/catandgosfilms