El primer largo del cuarteto de Essex se instala en el rock bailable 

El pasado 21 de agosto The Bohicas publicaban su primer trabajo, “The Making of”. Una de esas bandas que, con solo un EP y un puñado de conciertos, consiguió llamar la atención. No solo por sus referencias, o por los músicos de los que se rodeaban, como Eugene McGuinness (hermano del vocalista de la banda) o Franz Ferdinand. Un directo que trajeron al Primavera Sound de este año por partida doble (en el escenario Adidas Original y en el Ray Ban en formato acústico) y los próximos conciertos que llegarán en octubre a Madrid (de la mano de Live Nation) y Barcelona. Todo parecía indicar que ese primer largo que estaban trabajando iba a convertirse en la nueva bomba de relojería. Pero nada que ver. 

Dominic McGuinness (voz, guitarra), Adrian Acolatse (bajo, voz), Dominic John (guitara, voz) y Brendan Heaney (batería) tienen un directo electrizante. Entregados, eléctricos y empatizando con el público. Tras escuchar y re-escuchar “The making of”, nos queda claro que el directo es la mejor arma que tiene este cuarteto de Essex. Eso y un puñado de trallazos que enganchan desde el primer momento. La decepción llega cuando nos adentramos en los 13 temas que han grabado para Domino. Faltos de energía y de esa complicidad que en directo emanan. Un trabajo que no llega al notable pero en el que siguen despuntando determinados elementos que son los que mejor suenan en la formación: el sonar compactos, la oscuridad de algunos cortes y la energía. Esos son los elementos base que deberían potenciar en un próximo (si lo hubiera) trabajo. 

Que el primer tema para abrir un álbum de debut sea “I do it for your love”, no podemos negarlo, nos decepciona. Y es que lo que nos había llegado desde Essex con The Bohicas prometía una descarga constante de guitarras y una aceleración de los biorritmos. Sin embargo, más allá de los temas que prácticamente ya teníamos aprendidos y que les acercaban a Drenge o incluso a los primeros Arctic Monkeys, el resto de cortes no suponen más sorpresa. Eso sí, es innegable que saben cómo componer temas que acaban pegándose y pueden corearse a la mínima, como en este primer corte. 

“To die for” es uno de esos cortes que son los que comienzan a dar forma a The Bohicas. Mucho más intenso en cuanto las capas de las que va despojándose (los coros en modo falsete del “…I get high, I get low…”, esos riff de guitarra que siempre clavan, la ironía en sus letras: “…Fool me like a bank robber with a fake gun, fake gun…”,…) y que define de forma más precisa la propuesta musical de los chicos de McGuinness. En esta misma línea encontramos temas como “Where you at” o “XXX”. La primera hace acopio de versos casi imposibles “…saw your slick’s, hide your licks, I am an onion heel…” y de esa energía que nos falta en todo el trabajo. Como en “XXX”, uno de los temas que recuperaron de su primer EP, oscuro con la pegadiza línea de bajo de Adrian Acolatse. Se trata de uno de los temas que en directo más vida cobra y de los que pensábamos que The Bohicas iban a beber y a dejarse llevar. Sin embargo, uno de los temas más potentes del trabajo solo queda como una anécdota en este LP. 

“Swarm” es otro de esos temas recuperados y que vienen ya con las revoluciones subidas para no dejar escapar a nadie. Y es que son estos temas, los que están rodadísimos, los que mejor ilustran la propuesta musical de The Bohicas. Era en ellos en los que confiábamos y, finalmente, los que no han decepcionado. Frenético, sudoroso y con todos los elementos para convertirse en un tema a fundir a base de loops. Y, puestos a subir las revoluciones, la desmedida de “Upside down and inside out”. Más rock bailable de buena factura. 

Hablábamos de las referencias de base de The Bohicas, y con “Girlfriend” es innegable que Franz Ferdinand están presentes en la base rítmica (el “No you girls never know” suena prácticamente de forma mimética); no en vano Kapranos y los suyos están también en el sello Domino y fueron los que se trajeron a España por primera vez a los de Essex para que abrieran su concierto en el Ibiza Rocks de 2013. Pero “Girlfriend” va evolucionando y lanzando esa sonorización oscura que es la que mejor les sienta. 

Si tenemos que hacer alguna referencia más hacia la que “The making of” nos lleva, esa es la de “Red raw”. Y si no, enchufaros los primeros segundos del “Lithium” de Nirvana. Palabras mayores que acaban devorando a los pequeños susurros, así que no os preocupéis. Porque aunque “Red raw” convertirse en el tema de corte más oscuro del trabajo, no consigue igualar esa base rítmica que nos recuerda a la que cruzaban Novoselic y Grohl. Puentes siniestros, coros fantasmagóricos y ese hipnotismo que gran parte del grunge lucía en sus composiciones. 

El tema que da título al disco adolece de esa falta de energía que le encontramos a todo el trabajo. “The making of”, el corte, no termina de arrancar y se queda en un pequeño ejercicio rock salpimentado con guitarras y con esas huellas que venimos encontrando en todo el trabajo, las armonías vocales de McGuinness, Acolatse, John y Heaney. 

Raro encontrarse con “Only you”, un tema más apegado a la tradición pop que a la rockera. Y es que las distorsiones aplicadas a las 6 cuerdas poco consiguen hacer en este tema con momentos de luminosidad pop (no solo por los coros “pa-pa-pá”, las palmas,…). Vuelven a encontrar el modo de que los presentes salten al centro de la pista a bailar. 

Los tres últimos temas que cierran el trabajo (dos de ellos bonus tracks) parecen prolongaciones de “Somehow you know what I mean”. Vuelven a incidir en los coros, las palmas,… en todo lo que ya os hemos ido comentando. Eso sí, “In the mood” tiene algún momento de rock setentero con riffs directos y “Rewind replay” comienza y acaba con la batería de Brandan Heaney a todo gas. 

The Bohicas han lanzado un largo que quizás se hace eso mismo, demasiado largo. Falto de esas descargas de adrenalina que prometían con “Swarm” o con “XXX” (¿se tratará de un grupo de un solo tema bueno?) pero con las miras puestas en la energía que desprenden sobre el escenario. Ya os fuimos preparando para esa conquista que está por llegar en octubre con dos fechas en nuestro país: 23 de octubre en la sala Moby Dick de Madrid (entradas a partir de 18 euros en Live Nation) y el 24 de octubre en la Razzmatazz de Barcelona (entradas en Notikumi por 13 euros). Hasta ese momento nos quedamos con uno de los trallazos que destacamos de “The making of”, ese “Swarm” frenético y sin concesiones.

   

The Bohicas: “Swarm” (2015)