El Festival de les Arts anuncia a Crystal Fighters como primer cabeza de cartel. Los días 8 y 9 de Junio tendrá lugar su cuarta edición en la que también estarán bandas como Dorian, Elefantes, Lori Meyers o Mando Diao. 

La cuarta edición del festival ya ha dejado caer uno cuántos nombres como Carlos Sadness, Rayden, Rufus T. Firefly, Alien Tango y los valencianos Tórtel y L'emperador. Nos detenemos en este artículo para destacar la vuelta de los granadinos Lori Meyers a nuestra ciudad y reflexionar sobre la presencia de las bandas locales en el festival. 

No hace mucho que visitaban València después de un largo tiempo. Fue en el concierto que dieron en el Auditorio de La Rambleta dentro de los “Momentos Alhambra Música”, pueden leer la crónica pinchando aquí. En esa ocasión se sirvieron del espacio para presentar unos pasajes más sosegados de lo que nos tienen acostumbrados. En ellos pudimos comprobar esos giros infinitos que han ido dando a sus canciones con el paso del tiempo y que se han convertido en una piedra angular desde su último disco “En la Espiral”. El inicio con “Vértigo I” fue una buena introducción a ese momento en que la banda afirma que se encuentra y que les hace crecer de forma exponencial en la evolución de un sonido que ya no se aferra a los grandes éxitos y va más allá del consumo fácil. 

Seguramente en el festival paseen más los temas que ya son historia de la música y banda sonora de varias generaciones; dando presencia a la energía, la adrenalina y la exaltación que tanbién disponen al servicio de su público. “Luciérnagas y Mariposas”, “Emborracharme” o “Mi realidad”, cañonazos que reventaran en la Ciutat de les Arts i les Ciències. 

Uno de los aspectos a destacar con cada edición del festival es una mayor presencia de las bandas valencianas en su cartel. El clamor en este sentido es lógico y a alto volumen entre todos los implicados en la escena local, y el Festival de Les Arts ha encontrado en Sona La Dipu un aliado fiel para cumplir lo que debería ser condición indispensable. Sin embargo, no siempre la cantidad es sinónimo de calidad (y no nos referimos a la de las bandas, por supuesto) y tocar a las tres de la tarde ante un desierto de asfalto derritiéndose a 33º, frente a unos escasos valientes, no parece ni mucho menos la meta de unos músicos con la ilusión puesta en darse a conocer. Esperamos que para esta edición reparen más en este aspecto y haya unas mejores condiciones para nombres como Tórtel y L'emperador, confirmados ya para esta cuarta edición.

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