Como una enorme discoteca, donde los ritmos bailables y la contagiosa alegría de Alberto (Miss Caffeina) invadieron el Cortijo del Conde, dentro del ciclo GRANADA ALIVE! , desde el minuto cero. Costaba trabajo permanecer sentados de tantas ganas que teníamos de bailar junto a la banda y que fuesen ellos los que presenciasen a un público en despegue con “Mira como vuelo”.

Pero nos ha pasado una pandemia por encima y estos primeros conciertos, desde las sillas, siguen haciéndose extraños a la vez que necesarios. Desde que publicaron “Detroit” han girado por muchos escenarios, pero no han podido sacar nuevo trabajo, aunque, para la ocasión, sí traían temas nuevos que sirvieron como adelanto.

Comenzaron con fuerza y, entre su setlist, pudimos escuchar tanto temas de su último trabajo como algunos contenidos en sus discos anteriores como “Reina”, “Ley de gravitación universal”, coreada por el público, o la imprescindible “Merli”.  Como novedad, su último single “Me voy”. Muy interesante teniendo en cuenta que en este momento la banda está girando y grabando disco a la vez.

Una puesta en escena impecable, como siempre, con un apartado de luces que transforma el espacio de una forma mágica, transportándonos a esa especie de club de baile al que nos llevan en sus actuaciones. Un baile que cada vez se le da mejor a Alberto Jiménez, un frontman cada vez más dinámico y experimentado que, además, nos deleita con sus cambios de vestuario durante las actuaciones, un plus que siempre se agradece, por lo visual del momento.

En un recinto no demasiado lleno (hay que decir que ayer había programación fuerte en otros escenarios granadinos), con un público bastante respetuoso dadas las circunstancias y muchas ganas de festival, estos conciertos de Granada Alive!  están siendo la antesala perfecta de el esperadísimo Granada Sound, que ya se anunció por fin hace unos días y en el que esperamos estar para contaros cómo se desarrolla.

Crónica: Isabel Alonso

Fotos: Javier P. / Shanti