
Zaragoza. 11 Diciembre de 2010.
Si has asistido a un concierto de “los lesbianos” no es necesario que te expliquemos que es siempre un espectáculo.
Un autentico ente vivo que va mutando, mejorando, evolucionando, que cambia el repertorio y añade nuevas anécdotas, en resumen, una experiencia que anima a repetir, tripitir, “bla, bla, bla” eternamente.
En los últimos coletazos de una gira incesante y eternamente alargada parece que ya han puesto fecha de caducidad para su 1999 con una serie de conciertos “especiales” en los que dos horas y media ayudan a dar un repaso a casi la totalidad de las canciones de sus tres discos en castellano.

Por eso nos hemos ido a la mítica sala Oasis de Zaragoza para despedir en tierras mañas uno de los discos y los grupos que más guerra han dado este año.


Entre las gratas sorpresas de la noche estuvo descubrir como suenen muchas de las canciones “poco” habituales en el repertorio. Además de presenciar como evoluciona la anatomía de Juanra Planell es siempre un aliciente para las féminas.
La Sala Oasis vibró en una noche irrepetible donde los acordes melancólicos y el aire a despedida sólo dejaron entre los presentes más ganas de seguir disfrutando de los directos de Love of Lesbian.
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