El brillante segundo disco de la británica despliega una elegante producción r&b
Con su primer largo, “Is your love big enough?”, se adentraba en un r&b de corte clásico (“Lost & found”), dando cabida a los toques más jazzies (“Au cinéma”) y coqueteando con ritmos sincopados muy del estilo de tUnE-yArDs (“Forget”), con “Blood” Lianne La Havas se convierte en la diva de ese neo-soul de nueva factura. Neo-soul, indie-soul o como queramos llamarlo. De padre griego y madre jamaicana, Lianne La Havas está en contacto con la música desde bien pequeña; estudios en diversas escuelas artísticas y el trabajar abriendo conciertos para nombres como Alicia Keys, colaborando con bandas como Alt-J, Prince o Rudimental o incluyendo coros para trabajos de Paloma Faith… Era cuestión de tiempo que el buen ruido que hizo “Is your love big enough?” le diera resultados.
“Blood” se abre con esa bofetada directa que es “Unstoppable”, una declaración de intenciones sin medias tintas en la que comenzamos a escuchar algunas de las constantes en este trabajo: líneas de bajo que retumban y acompañan bases electrónicas discretas y sin estridencias. Tremendo el groove con el que Lianne La Havas comparte esa “sangre” que titula el disco, como ese “Green and gold” con los toques funk que siempre delatan a Jamie Lidell.
Espacio para temas más comerciales, más pop como con “What you don’t do”, con piano, metales y el juego vocal de los coros. Esta máxima se repetirá de alguna forma o de otra a lo largo de los 10 cortes de “Blood”, ya sea cambiando cuerdas por metales o atreviéndose con los temas más lentos. Es así como encontramos “Midnight”, que introduce metales y esos estribillos en los que se entremezclan los coros con la propias líneas de la cantante (y nos remite al "Doo-Wop" de Lauryn Hill) . Potencia vocal que se sujeta por momentos con una reverb exquisita.
La huella de Janelle Monáe, de Jill Scott, de Esperanza Spalding o incluso de Sara Bareilles… Alicia Keys, Beyoncé… Es fácil encontrar referentes musicales que nos llevan al terreno que explora Lianne La Havas. Tanto como las tierras que pisa en este segundo trabajo. Así nos encontramos con “Grow”, una mezcla entre el folk que tan bien conoce la londinense y un rock “artie” de difícil empaste. O con “Never get enough”, quizás el corte más disonante de este disco.
Espacio también para los temas lentos y esos intentos de desnudez emocional. “Wonderful” tiene todos los puntos para ser una de esas canciones que en acústico ganan puntos por lo emocionantes que son. Pero este no es un trabajo acústico, sino uno en el que la producción crece incluso en estos momentos más íntimos. “Wonderful” es una de las perlas de “Blood”, junto a “Ghost”, otra de las piezas a medio tiempo y que prácticamente se mantiene vírgen (por lo que a producción se refiere) hasta el final. También ralentizando el tempo “Good goodbye”, que cierra el trabajo elegantemente con unos arreglos de cuerda tan evocadores como cinematográficos: “…no one ever leaves you. I don’t need faith, I just want proof…”.
“Blood” es uno de los trabajos a tener presentes en esta temporada por su redonda producción, por las sensaciones que transmite en cada una de sus escuchas y por el trabajo de composición de Lianne La Havas. No será hasta finales de noviembre y ya en diciembre cuando vuelva a subirse al escenario en Europa (previamente pasará por EEUU), pero de momento (y para variar), ni rastro de fechas en nuestras tierras. Habrá que cruzar los dedos… Nos quedamos con “Unstoppable”, el tema que nos ha arrastrado hasta el universo La Havas.
Lianne La Havas: “Unstoppable” (2015)
Tracklist “Blood”:
01. Unstoppable
02. Green and gold
03. What you don’t do
04. Tokyo
05. Wonderful
06. Midnight
07. Grow
08. Ghost
09. Never get enough
10. Good goodbye
Más info:
http://www.liannelahavas.com/splash/splashpage_6
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