NOVEDADES

martes, junio 04, 2019

Adiós a Deluxe, local de referencia de la cultura valenciana.

Deluxe Pop Club, regentado por Luís Nacher y situado en el barrio de Ciutat Jardí de València, ha aguantado abierto a lo largo de 11 años en que ha sido un pequeño oasis de resistencia para una forma de ver la música pop y la cultura en general, en vías de extinción. Todo fluye y es momento de que sus dueños tiren la toalla para ocuparse de otras cosas. Este es nuestro pequeño homenaje. 


Luis Nácher

Recuerdos, recuerdos... son tantos y tan embriagadores que es prácticamente imposible nombrar alguno. ¿Cuando presenté mi primer disco en solitario? ¿Cuando toqué allí con Lülla? ¿Cuando subí a hacer coros con Doctor Divago?¿Cuando vi allí a Elle Belga? ¿Todos los cumpleaños de amigos, celebraciones, encuentros?... Es imposible ya disociar este lugar de mi vida. Y probablemente lo mismo les pase a unos cuantos que también han intentado estar al pie del cañón en cuanto a cultura se refiere, en una ciudad en la que siempre es en los ámbitos más subterráneos donde suceden las cosas más interesantes. En ese sentido, Deluxe Pop Club ha representado un shangri-la. Un lugar donde tan pronto podías ver a alguno de tus músicos favoritos o donde los músicos locales (y no por ello menos favoritos) podían tocar cuando quisieran, así como un punto de encuentro muy importante. Siempre estaba el Deluxe.

Por eso a mi 11 años se me antojan pocos. Parece toda una vida. Me va a ser muy, muy difícil entender a esta ciudad sin ver a Luis tras la barra, sin contemplar ese escenario rojo, sin asistir a esas pinchadas de Youtube, a esas paellas de sábado, a esos Quiz Deluxeros. Al final ha sido más un club de amigos que una sala de conciertos o local nocturno.

Al frente de todo eso se sitúan Luis Nácher y su pareja, Silvia Colbi. Porque no porque el uno sea la cara visible, el músculo que lo hacía todo fácil, la otra dejaba de estar también ahí, como el 50% de la ecuación. Juntos construyeron todo esto con auténtico entusiasmo y me consta que han luchado a brazo partido para mantenerlo a flote, teniendo en cuenta que además entre los dos cuidan nada menos que a tres hijos, uno de ellos afectado por la enfermedad rara (MEF2C, más info aquí). Menuda pareja de titanes.

Pero la vida debe seguir su curso, todo fluye, como decía el Ronin Asa en aquél famoso manga, nada permanece. Las circunstancias familiares hacen que la llevanza de un local de ocio de estas características, ajeno a subvenciones o ayudas de ningún tipo y capeando constantemente impedimentos institucionales, sea inviable para unas personas que deben ocuparse de una familia numerosa. Ellos apostaron y ganaron 11 años de numerosas satisfacciones que han hecho felices a mucha gente. Que echen ahora el cierre es justo y necesario. No es una retirada, ni una derrota. Todo lo contrario: es una victoria. Lo hacen porque quieren y eso, aunque nos apene, es todo un triunfo.

De momento no hay trazas de que el local se vaya a traspasar. Por lo visto no hay nadie tan valiente en esta ciudad como para hacerse cargo de algo semejante. Un lástima, que pone aún más en valor la labor desinteresada de estas personas.

Rememorar, como decía al principio, todo lo visto, oído y vivido en Deluxe en once años es ardua labor, que por supuesto no emprenderemos aquí. Pero entre todo el equipo que compone Alquimia Sonora reunimos unas cuantas vivencias que nos llevaremos cada uno a la tumba. Yo, personalmente, tanto como músico, dj o espectador y mis compañeras igualmente, que han echado allí más horas que los camareros. Por eso será imposible olvidar conciertos de Julio Bustamante, Lanuca, Polonio, El Ser Humano, Galope, Hank Idory, Mist, Ricardo Lezón, Joaquín Pascual, Elle Belga, Rafael Berrio, Enric Montefusco y un sinfín más.

La vida por supuesto, está hecha de ciclos. Y es probable que surja otro local de similares características (ahí está, por ejemplo, George Best o el recientemente inaugurado Centro Excursionista) pero será difícil emular el calado emocional que ha logrado con su trayectoria esta pequeña "salita" de cortinas y paredes rojas que parecía más el salón de nuestra casa que un garito. Con un tipo grande, abierto, sonriente y capaz de todo para hacerte sentir bien al frente. Luis ha sido una fuerza de la naturaleza a la hora de contentar a todo el mundo, sin (ojo, que esto es lo más importante) pedir nada a cambio. Sólo por ello ya se me antoja un personaje irremplazable así como toda la gente que le ha ayudado durante este tiempo, con Silvia, por supuesto, a la cabeza.


Gente como esta es siempre necesaria en una tierra, la valenciana, tan constantemente asediada por el "meninfotisme" (una expresión muy de aquí que significa algo así como mirarse uno siempre al ombligo sin tener en cuenta lo que sucede alrededor) y la falta de impulso de TODA la cultura por las instituciones públicas. Los poderosos sólo quieren ver lo que les interesa y por eso es importante la labor desinteresada de gente que deja espacios y tiempo de su vida para promocionar cualquier aportación artística por humilde o fuera del faro predominante que ésta sea.

En ese sentido, y la verdad es que en todos. Se les va a echar mucho de menos. Su cierre de persiana va a ser también el cierre de un hueco del corazón que mucha gente -entre los cuales, la gente que hacemos Alquimia Sonora nos incluimos- tenía guardado para Deluxe y todo lo que representaba. Más que cierre de un local es cierre de una época, por tanto, que a la vez que supone un acontecimiento desafortunado, es también, esperamos, representativo de la apertura de nuevas épocas y nuevos proyectos para esta buena gente. Desde aquí les deseamos toda la suerte del mundo y les manifestamos nuestro amor y fidelidad incondicionales. Habéis sido, sois y seréis grandes. Gracias por todo.

Fotos para el recuerdo:























Share this:

Publicar un comentario

¡Comparte tu opinión!

Esperamos tu comentario

 
Copyright © 2014 ALQUIMIA SONORA. Designed by OddThemes