Como dice mi amigo Jack, vayamos por partes.

Por un lado estaba la Rihannita (laralara laríta) cantando en el escenario tan ricamente ahí con sus coristas y tal cuando, oh, misterios de la naturaleza, tuvo un pequeño resbalonaco dando de bruces contra el suelo.

Como si nada, y es que ella es mu pofesional, la de Barbados siguió ¿cantando? mientras recuperaba la verticalidad que tan bellamente le caracteriza (perdón, derrape de neurona) hasta acabar el mencionado concierto de Canadá. Vaaaaale, es sospechoso que se caiga y siga sonando su voz de fondo llevándose el micrófono a la boca velozmente, pero jamás tacharemos a RiRi de hacer playback en Alquimia Sonora, ¡dios nos libre!

Y ahora la segunda anécdota que se lleva Rihanna en el día de hoy, como si de un dos por uno del Mercadona se tratase, se centra en la ceremonia de los BET Awards celebrada recientemente.

Estaba la presentadorita (laralara laríta) tan tranquilamente en la gala entregando galardones cuando, al anunciar el premio del público, metió el gambón hasta atrás y el premio que pertenecía a Chris Brown se lo entregó a Drake y a nuestra adorada Rihanna.

Lo más gracioso, acabando con el tema, es que el propio Drake sí subió al escenario a recogerlo y lo agradeció a todos los presentes...

Os dejamos el video del toñazo de Rihanna bajo estas lineas.