Este que suscribe siempre ha sido un frikazo de los videojuegos.

Empecé en las típicas recreativas de los bares del barrio con "Super Mario Bros", "Asteroids", "Donkey Kong" y similares para pasar a la comodidad hogareña de la portatil de Sega, la famosa Game Gear, y echarme las tardes de vicio con "Sonic The Hedgehog", "Chuck Rock", "Columns" y un largo etcétera.

De ahí salté a la maravillosa época de los 16 bits y me hice raudo con una Super Nintendo y su fantástico "Super Mario World" en la que también cayeron una larga tanda de cartuchos como "Donkey Kong Country" (con la novedad de unos flipantes gráficos prerrenderizados), "Aladdin" (basado en la película de Disney), "Street Fighter II" (clásico de la lucha en 2D donde los haya), "Zelda A Link to The Past" (Rol del bueno, bueno), la trilogía "Final Fight" y otras tantas decenas de juegos más.

En la era Sony (dominaba el mercado por goleada), me hice con una Playstation, también conocida PSX y posteriormente PSOne, y alucinaba con esos primeros gráficos poligonales en luchas como "Soul Blade" o "Street Fighter EX Plus Alpha", carreras de coches como "Destruction Derby" o plataformas como "Croc" y "Spyro The Dragon". Luego llegó la Playstation 2 y ahí fue cuando de verdad empezó la revolución de los videojuegos tal y como los entendemos ahora.

Sony se sacó de la manga, además de adaptar con una alfombrilla de baile las recreativas Dance Dance Euromix para el salón de tu casa, un invento llamado Eye Toy que consistía en una cámara conectada a la videoconsola con un DVD con minijuegos y pruebas. En él, el protagonista eras tú mismo ya que, con tu imagen recogida por la cámara Eye Toy, tenías que golpear ninjas que te asaltaban o jugar a un "Simon" musical. También triunfaron, cómo olvidarlo, con los Singstar y sus micrófonos: karaoke para toda la familia y éxitos de todos los tiempos en modo solista o formando duetos.

También pasaron por mis manos brevemente una Gameboy Advance (qué buenos "Castlevania" me eché ahí) y una Gamecube; de hecho esta lo hizo dos veces, una en versión morada, que revendí y otra negra que también acabé despachando.

En estos momentos poseo una Nintendo DS y una Wii que no hace otra cosa que coger polvo 29 días al mes (¡y eso cuando saco un día libre!) y cae alguna que otra partida en las Playstation 3 o XBox 360 de mis amigos... también una vez al mes.

Todo este rollo porque, hace ya unos años, recuerdo ir de compras a un Mediamarkt y quedarme enganchado 40 minutos de reloj con una propuesta videojueguil de lo más original. Para XBox habían creado el perfecto simulador de Disc Jockey que consistía, ni más ni menos, que en un "plato" de mezclas con varios botones con los que lograbas efectuar los scratchs más alucinantes mientras pulsabas otros botones para incluir samples y puntuar más altos.

Ahora, en Doctortrade.com, tenemos el videojuego con la mesa de mezclas en una promoción en la que lo puedes encontrar por tan sólo 36€ y hasta un máximo de 45€, es decir 60€ de ahorro con respecto al precio original... Lo encontráis en este link.

Y yo me pregunto: ¿será muy tarde para hacerme con una XBox ahora? Y lo que es más importante, ¿me dará la Jefaza de Alquimia Sonora un par de meses libres para poder viciarme tranquilito a DJ Hero, eh, eh?