Este
sábado 10 de marzo, Adrian Levi estrena en directo su tercer álbum,
“Unexpected” en la Sala Russafa acompañado sobre el escenario
por Nacho Martín, Carlos Soler Otte, Guille y Javier Sáez. En
Alquimia Sonora reseñamos el último y mejor álbum del solista.
“Unexpected”,
tercer álbum en la discografía de Adrian
Levi, supone una sorpresa
por los nuevos espacios musicales transitados por el artista a la vez
que confirma de forma definitiva el sello personal de su autor.
Sintetizadores, percusiones y ritmos programados, junto a teclados y
guitarras, se erigen en elementos esenciales a la hora de vertebrar
el sonido de unas composiciones que reafirman su inconfundible estilo
haciendo más atractivo si cabe su universo sonoro.
Tras
su paso por bandas como Süide
y Crow Jane,
con los que grabó “Cotradiction”
(Nevada discos, 2013), Adrian
Levi publicó en enero de
2016, “My Hidden
Pockets” (Nevada
discos, 2015) como presentación de su proyecto en solitario. Un
magnífico estreno con nueve canciones que aunaban un atractivo
sonido y una madurez compositiva incuestionable. Basta recordar “Dead
kisses” y la muy
escuchada “Make me
smile” para dar una
idea de la consistencia de este primer álbum que se encaramó a lo
alto de las listas de las mejores entregas locales del año.
“Under
Songs” (Nevada discos),
publicado el pasado año, significó un ligero viraje en su sonido,
privilegiando teclados frente a guitarras a la hora de definir las
canciones. Una nueva propuesta del artista cuya solidez quedaba
confirmada por obras del calibre de “Universe”
o “Fall inside”,
con las que consiguió de nuevo la atención de público y medios
especializados.
En
casi dos décadas, tanto sobre los escenarios como en la sala de
ensayo o en la intimidad de su casa,
Adrian Levi ha sabido
desvelar el secreto para facturar hermosas canciones fruto de una
madurez profesional y personal. Gracias a su instintivo manejo de los
tiempos, la composición de tan sencillas como emotivas melodías,
una facilidad para la construcción de estribillos seductores y unas
letras que le dan un carácter casi conceptual al album. En conjunto
“Unexpected”
destila en todos sus cortes la convicción del músico que tiene tan
claro su mensaje como la forma en la que transmitirlo. Nueve
canciones que reafirman la trayectoria de Adrian Levi como una
coherente evolución en la búsqueda del máximo de emoción con el
mínimo de elementos formales que se resuelve en un disco a la vez
austero y deslumbrante. “Unexpected”
comparte coordenadas con la obra de grupos como Air, Lamb o The XX,
asiduos viajeros de cartografías musicales neblinosas que conjugan
con aparente sencillez densidad emocional y exquisitez musical.
Foto: Nacho Ruiz
El
disco se abre con “Red
monsters”. Segundo tema
elegido como adelanto del disco, participa de esa épica tan cara al
sinthpop de los ochenta y es uno de los mejores cortes que contiene
el álbum.
“Soft
rain” es junto a “Stay”
la canción más reposada del álbum, si bien la primera lo es de una
manera luminosa, en la segunda nos vemos abocados a una exquisita
melancolía. Una ligera cadencia casi tropicalista envuelve “Soft
rain” gracias a sencillas percusiones e hipnóticos coros sobre los
que se acomoda fácilmente una brillante interpretación vocal.
“Stay” es un ejercicio de elegancia y sobriedad en esa sencilla
melodía de piano y esos arreglos de cuerdas que acompañan los
susurros de Adrian Levi y que marcan el momento de mayor melancolía
que encierra el disco.
Sobre
“Forgive this time”
sobrevuela el sonido de The Postal Service en “Give Up” y nos
hace pensar en las similitudes entre la evolución de la obra de
Adrian Levi y la de Ben Gibbard, cantante de Death Cub For Cutie. “A
boy named Sue”, canción
en la que de nuevo los teclados se erigen en protagonistas, precede a
“Tower of control”,
una pieza de aires
trip-hop con un desarrollo
brillante en su estribillo que nos habla de librarse de ataduras
mientras teclados y coros acentúan el carácter dramático del tema.
Una vez más Jordi sabe facturar una pieza impecable en cuanto a
composición y brillantemente resuelta en arreglos y producción. En
“Days are gone”
reconocemos el sabio manejo de los tiempos para construir una
canción que se abre con una repetitiva melodía de piano a la que se
suman un ritmo cautivador. Construida con un efectivo crescendo, la
canción se convierte en uno de esos irresistibles temas que, gracias
a su memorable riff de guitarra, nos hace echar de menos una pista de
baile bajo las suelas cuando la escuchamos. Una canción para cerrar
los ojos y dejarse llevar.
“Don't
fail” es otro de esos
tempos lentos que tan bien sabe manejar Adrian Levi. Apenas unas
pinceladas sonoras para dibujar una atmósfera etérea que precede a
“Put de blame”,
pieza que cierra el disco. Tras una intro con guitarra acústica,
caja de ritmos, teclados y sintetizadores abren la canción a
sonoridades próximas a bandas como Chvrches o Beach House,
integrando de una forma tan brillante como cautivadora elementos de
la música de baile en la narrativa indie-pop de Adrian Levi. Líneas
de bajo con propensión al vértigo y melodías de teclados con sabor
a película de espías estructuran la arquitectura musical de una de
las mejores canciones que contiene “Unexpected” y la convierten
en toda una declaración de principios.
Registrado
entre el invierno y la primavera pasadas, “Unexpected” ha sido
grabado, producido y mezclado por Carlos
Soler Otte, músico
fundamental en la trayectoria de Adrian
Levi tanto en el estudio
como sobre el escenario. En los créditos del álbum figura también
Javier Sáez,
encargado de los coros y del magnífico riff de guitarra de “Days
are gone” y responsable
también del diseño gráfico del libreto y de la magnífica portada
que sirve de excelente presentación de este esperado “Unexpected”.
MÁS INFO:
https://adrianlevi.bandcamp.com/album/unexpected
0 Comentarios
¡Comparte tu opinión!
Esperamos tu comentario