Un día de verano. Es a lo que nos transporta Josh Rouse con este nuevo disco, ahora bajo el sello zaragozano de Grabaciones en el Mar y con la presencia de dos músicos sobresalientes como Cayo Bellveser al bajo y al piano y a Xema Fuertes al banjo,tres cubano, batería , guitarra y voces. Tres músicos solamente que se sobran para dominar una variedad notable de instrumentos.

Un álbum de nueve canciones ligeras y vitalistas, sin perder la elegancia propia de Rouse , un regreso a su idioma natal tras el experimento en castellano de su anterior trabajo, " El Turista", muy cuestionado por la crítica y el público, que clama por el regreso de Rouse a sus inicios de pop americano intimista.

Rouse , un joven cantautor de Nebraska que consiguió cautivar al público estadounidense con el brillante "1972" lanzado allá por el 2003 , considerado el mejor trabajo de su carrera hasta la fecha ( seguido del también genial "Nashville") nos regala en este nuevo disco media hora de música reinventada, soleada, optimista, por momentos tan mediterránea y americana a la vez, con toques de jazz y soul sesenteros que nos transportan a una época musicalmente entrañable.

El disco se abre con "Diggin´ in the sand" , uno de los temas más luminosos del álbum, con un agudo banjo que comienza de forma divertida a dar color a las estrofas con toques de percusión latina y que se afianza en un estribillo repleto de instrumento y la cuidada voz de Rouse, tema que da paso a "Moving On" segundo sencillo del álbum cuyo videoclip sigue ese recorrido veraniego del que hablábamos, en el que vemos a la banda realizando una travesía de vacaciones por Madagascar. Es el tema más extenso del disco, dura apenas 4 minutos cuando la mayoría de canciones apenas llegan a tres, es quizá por eso por lo que se vuelve el más monótono y por veces repetitivo, aún sin perder ese fondo de buenas vibraciones que envuelve al álbum.

Con "Fine Fine" Rouse se lanza a la bossa nova de los ´50, un tema que incita al baile y al que seguirá el original "To the clock , to the city", más pausado que los anteriores pero igualmente intrépido. La jazzera "Bluebird" cautiva ya desde el principio con un delicado piano que se une a la cálida y matizada voz de Josh Rouse, que en "Lazy Days" nos sorprende a ritmo de un alegre cabarét con harmónica incluída, de esos que al escuchar uno se imagina recorriendo baldosas a pequeños saltos cual Bert en Mary Poppins.

"Oh, look what the sun did", el primer single del disco, quizás el tema que personalmente más me haya gustado por la creatividad y vitalidad musical que entraña, con pequeños saltos de escala ascendentes y descendentes, palmas, un tema muy de banda sonora alegre y sesentera.

Los dos temas que cierran el disco son muy diferentes. "Friends" encarna la cara más oscura del álbum y en cambio, "Disguise" la más luminosa y pegadiza, que gana mucho con un estribillo puramente instrumental que nos transmite buenísimas vibraciones.

En definitiva, un álbum optimista, alegre,vital, fácil de escuchar, de esos que uno se pone como banda sonora de un soleado día de vacaciones de verano.